Comunidad de Coñaripe acusa a Bienes Nacionales de impedir la inscripción de un terreno
CIEN HECTÁREAS. Desde la Seremía argumentaron que un informe favorable habría implicado emitir un acto susceptible de impugnaciones por terceros.
En disputa están el Ministerio de Bienes Nacionales y la Comunidad Indígena Carlos Antimilla. Esta última acusó que la cartera impidió la inscripción en el Conservador de Bienes Raíces de cien hectáreas que colindan con la localidad de Coñaripe, en Panguipulli, y que se ubican en la ribera este del lago Calafquén.
Dicha comunidad busca la reivindicación de ese lugar, al que denominan Kultrunkura, el cual indican "desde la llegada del estado de Chile se encuentra amparado por el Título de Merced N° 2.429 del año 1913 de la reserva encabezada por don Carlos Antimilla, título que fue dividido y adjudicado, a excepción de las cien hectáreas de Kultrunkura".
Proceso
Beatriz Chocori, vocera del Espacio Kultrunkura explicó que hace tres años la comunidad inició un proceso judicial que se resolvió en la Corte Suprema, la cual determinó que no existían dueños de ese espacio de cien hectáreas. "Estamos hablando de un periodo de más cien años donde ese terreno ha permanecido sin inscripción y que para nosotros es parte integrante del Título de Merced de nuestra comunidad", sostuvo.
Existiendo para la comunidad la posibilidad de hacer la inscripción de ese espacio, siguiendo el proceso administrativo correspondiente y tras conversaciones previas "que se realizaron de buena fe" -precisó Chocori- y de acuerdos con los seremis de Bienes Nacionales del anterior y actual gobierno, "lamentablemente en la última etapa de la inscripción, donde hicimos la publicación y donde no hubo oposición de ningún particular u otra entidad, nos encontramos con que piden un informe a Bienes Nacionales el que fue desfavorable", relató la vocera.
Ese informe que impide la inscripción de las cien hectáreas, según expresó Chocori "ha sido una decepción bastante grande para la comunidad. Nosotros esperábamos que fuera otra la postura de Bienes Nacionales, entendiendo que no existe otra limitante u obstáculo para la inscripción. Cabe hacer mención que la comunidad Carlos Antimilla lleva más de tres años haciendo uso efectivo del lugar". Hasta el 14 de diciembre de 2019, la Iglesia Católica ocupó ese lugar que se conocía como la Misión de San Miguel y "hoy día la Diócesis de Villarrica no tiene ningún derecho sobre esa propiedad", precisó la vocera del Espacio Kultrunkura.
Acciones
En una carta dirigida a la ministra de Bienes Nacionales, Javiera Toro, la comunidad Carlos Antimilla expuso la situación y esperan sostener una reunión con la autoridad, a fin de resolverla, en el marco -dijo Chocori- "del reconocimiento de los derechos de los pueblos indígenas". Por otra parte, la comunidad interpuso un recurso de reclamación en la Corte de Valdivia.
Bienes nacionales
Frente a esta situación, desde la Seremía de Bienes Nacionales informaron que con los antecedentes que se tuvieron a la vista respecto de la solicitud de la comunidad indígena Carlos Antimilla y "aplicando los supuestos jurídicos del derecho nacional e internacional, no fue posible fundamentar por nuestro Ministerio el cumplimiento del estándar de seguridad jurídica requerido para el reconocimiento de la propiedad indígena preexistente. Un informe favorable habría implicado emitir un acto susceptible de impugnaciones por terceros y por los órganos que ejercen el control de legalidad".
Al respecto, el seremi Jorge Pacheco indicó que "como ministerio estamos profundamente comprometidos con las causas de restitución de tierras de los pueblos originarios. De hecho, uno de los pilares fundamentales de nuestra administración es trabajar para que la restitución sean procesos que devuelvan el sentido y la pertenencia territorial a las comunidades indígenas que habitan nuestra región".
Sin embargo -añadió- "nuestra misión institucional es el resguardo del patrimonio fiscal que le pertenece a todas y todos los chilenos. Nuestro gobierno cree fielmente en los canales de diálogo y en el trabajo conjunto con las comunidades".
Junto con ello, expresó que "la voluntad del ministerio es y siempre será dar cumplimiento a los procesos administrativos, para después determinar el destino del territorio. Debemos continuar con el diálogo ya iniciado desde nuestra Seremi para unificar criterios y continuar con la buena relación que hemos tenido con nuestros pueblos originarios".