Heriberto Weber Gebert
En la columna "Valdivia capital de una Nueva Región", del H. Diputado don Gastón von Mühlenbrock, (Diario Austral 01.10.22 pág.8), al rendir homenaje a la "perseverancia de tantos hombres y mujeres por esa aspiración", refiriéndose a personas que lucharon por lograr, lo que hoy tenemos, nuestra Región de Los Ríos -lista en la que inmerecidamente me incluye- olvida a quién ha sido el más importante impulsor de esta gesta ciudadana, don Heriberto Weber Gebert.
Don Heriberto, actual presidente del Comité Nueva Región, fue el primero que levantó su voz en contra de la regionalización decretada en 1974 y que dejó a la provincia de Valdivia bajo la tutela de Puerto Montt, como nueva capital de la Región de Los Lagos.
Él, como presidente de la Asociación de Pequeños Industriales y Artesanos APIA, organizó la primera defensa, ante la injusta relegación de Valdivia. Lideró la petición que el 4 de septiembre de 1974, 43 gremios solicitaron a la Junta Militar, la exclusión de la Provincia de Valdivia de la X Región, solicitud que como sabemos fue rechazada.
Estuvo al frente de la marcha que en 1983 más de 25.000 personas demandaron la división regional, estuvo en todas las instancias que llevaron nuestra lucha ciudadana a buen puerto y desde esa fecha, nunca dejó de luchar, día tras día, por nuestra independencia regional.Es necesario no olvidar a quienes, cómo don Heriberto, dieron parte de su vida, y la siguen dando, por hacer de la Región de Los Ríos la mejor de Chile.
Se agradece al señor Gobernador Regional don Luis Cuvertino y a los Consejeros Regionales, el reconocimiento que le dan a don Heriberto, otorgándole la Medalla Nueva Región en nuestro 15° aniversario.
Jaime Matamala Elorz Secretario Ejecutivo Comité Nueva Región Los Ríos
Sugiero
Si el Congreso Nacional renuncia por segunda vez a ejercer una de sus potestades esenciales, en este caso, la función constituyente y decide que otro cuerpo colegiado redacte un texto que reemplace a la Carta Fundamental vigente, tantas veces ya reformada, propongo que éste sea íntegramente elegido, sin escaños reservados para representantes de los pueblos originarios ni paridad de género en materia de resultados y, que sus miembros, pienso en cincuenta, sean elegidos con criterios de proporcionalidad y equidad territorial. En cuanto al plazo para cumplir con el encargo, éste debería se menor a nueve meses, sin prórroga.
Asimismo, quienes no militen en partidos políticos sólo podrán ser candidatos en la medida que sean patrocinados por alguno de ellos. En otras palabras, sin pactos entre los mal llamados "independientes". Sabemos, después de la Convención, que éstos no existen.
Dada la reciente y frustrada experiencia, me parece necesario que existan "cláusulas pétreas", es decir, normas e instituciones vigentes inmodificables. Por ejemplo, el carácter republicano y democrático del régimen político; la igualdad ante la ley; la independencia del Poder Judicial; la existencia de derechos individuales y de una jurisdicción constitucional; el carácter unitario y nacional del Estado chileno; el rol insustituible de los partidos políticos; la existencia de un quórum de reforma constitucional supra mayoritario, etc.
En otras palabras, se trata de preservar la convivencia civilizada. Además, deberán contemplarse mecanismos y recursos idóneos para evitar la trasgresión de éstas principios.
Por último debería contemplarse un Plebiscito de Salida, con sufragio obligatorio y un quórum especial de aprobación de 4/7, estableciéndose que en el caso de no aprobarse la propuesta, seguirá vigente la Constitución que hoy nos rige y que se clausura el proceso de elaboración de una Carta sustitutiva.
Jorge Eduardo Vives Dibarrart Abogado jevivesd@gmail.com
¿Cuándo protestan los mayores?
En el Día Internacional de las Personas Mayores no vi a nadie hablando de ellos, no hay medidas concretas ni urgentes en el Congreso y tampoco son tema de conversación. Es como que no quisiéramos ver que somos una sociedad que envejece y que el llamado envejecimiento positivo no siempre llega.
La ONU en su mensaje central de este año hace referencia a la capacidad de resiliencia que tienen las personas mayores e invita a crear conciencia y desafiar los estereotipos negativos ante el envejecimiento. Resiliencia, al parecer eso es lo único que les queda; tras la pandemia no solo se exacerbó la desigualdad sino que, también, aumentó la depresión (de un 24% pasó al 38%) y la ansiedad (de un 40% al 52%) en la tercera edad.
¿Cuándo haremos algo? No me imagino a ningún adulto mayor protestando en la calle o saltando torniquetes para así poner en la palestra sus necesidades. Vivir felices hasta el último día de la vida es un derecho de todos y todas las personas mayores, sin importar las condiciones económicas e incluso de salud.
Hago una invitación a mirar la adultez mayor a los ojos, es el primer paso para generar un cambio. Solo si valoramos la experiencia y la sabiduría que los años vividos entregan, podremos convertirnos en una mejor sociedad.
Edgardo Fuenzalida Fundación Las Rosas