La estrecha relación de Valdivia con lo último de Ignacio Agüero
REALIZACIÓN. El documentalista presenta "Notas para una película", donde revive la figura de un belga que recorrió La Araucanía y Los Ríos en el siglo XIX. El antropólogo Adrián Silva hizo la investigación.
La historia es real, aunque tal vez no tan conocida en estas latitudes.
En 1889 el ingeniero belga Gustave Verniory llegó a Chile y fue enviado por el Presidente José Manuel Balmaceda a la Araucanía para liderar la construcción de la vía férrea entre Victoria y Toltén. El joven profesional de tan solo 24 años de edad quedó maravillado con el paisaje y las costumbres locales, aprendió mapudungún, se mezcló con el pueblo Mapuche y vivió por un tiempo en Lautaro. Incluso puso sus vivencias en el libro "Diez años en la Araucanía 1889 - 1899".
El documento histórico fue publicado en 1975 y tuvo nuevas ediciones gracias a Pehuen Editores en 2001 y 2005. Además la figura de Verniory volvió a cobrar fuerza cuando se encontró la casa que ocupó originalmente en el siglo XIX, muy posteriormente transformada en la Funeraria Manríquez. Es la misma que fue destruida por el terremoto de febrero de 2010, que terminó por sepultar la idea de crear un museo en el lugar.
Con estos antecedentes fue que el cineasta Ignacio Agüero le comunicó al antropólogo Adrián Silva de la Dirección Museológica UACh, su intensión de hacer una película. Desde 2004, el director de "Nunca subí el Provincia" era un colaborador frecuente de la Muestra de Antropología Audiovisual de Valdivia. Además había trabajado con Silva en el cortometraje documental "Lautaro", por lo que no extrañó que ahora le pidiera concretar una nueva colaboración: investigar las huellas de Verniory.
Así nació "Notas para una película", que tras su paso por el mercado de Cannes el primer semestre tendrá su premiere mundial en el 29° Festival Internacional de Cine de Valdivia.
El documental de creación explora la transformación del territorio de La Araucanía a través de los ojos de Gustave Verniory, quien es interpretado por el actor Alexis Mespreuve. El filme de 105 minutos de duración es en blanco y negro, lo que en cierta forma facilita la transición en pantalla entre presente y pasado.
Territorios
Para reconstruir la historia el equipo realizador recorrió los mismos lugares por los que anduvo Verniory hace más de cien años. El trabajo se facilitó gracias a la labor del historiador Pablo Maripán. También gracias a que Adrián Silva es originario de Lautaro y tiene vínculos personales y profesionales de más de tres décadas con autoridades ancestrales, lo que ayudó a entrar en el territorio y a la realización de entrevistas completas en mapudungún sobre la cultura y el pasado Mapuche.
Aunque el grueso del relato transcurre en la Región de la Araucanía, también hay presencia de paisajes de Los Ríos. Es que en su momento Verniory también estuvo en Valdivia, lo que en la película es integrado como una forma de demostrar que el territorio Mapuche no está circunscrito a solamente una zona en particular. Adrián Silva dice que el interés por viajar más al sur fue por descubrir aquella ciudad de la que había escuchado en reiteradas ocasiones en medio de su afán por abrir caminos