Predecir el futuro
Conversaba hace algunos días con un muy buen amigo y compañero de una vida, acerca del acontecer político en nuestro país. Al plantearle mis inquietudes respondió "contestarlas acertivamente, para mí, requiere tener habilidades de futurólogo, que no las tengo".
El balón quedó a mi lado de la red. Decidí hacer mi tarea, revisando mi experiencia profesional de más de sesenta años. En los 80s, las técnicas Delphi - desarrolladas en los 50s para la defensa de los EE.UU. - definitivamente tuvieron influencia en mi accionar gerencial, en la Armada y posteriormente en la empresa privada aeroespacial canadiense.
La técnica Delphi es una herramienta cualitativa que se usa para extraer la opinión de expertos sin el costo de la interacción "cara a cara", cuando la información de una situación que se desea conocer es restringida. Pese a un gran consumo de tiempo, es simple en su aplicación y si permite interacción. El manejo estadístico y repetitivo de data usando un panel de expertos es bastante razonable en términos de expectativas.
No obstante, el proceso para alcanzar una conclusión consensuada puede ser complejo.
A modo de ejemplo, en la internet se pueden encontrar estudios acerca del uso de dicha técnica en la resolución de problemas sociales, políticos, logísticos, médicos, infraestructura, socio-económicos, etc. De ahí concluyo que dichas técnicas son totalmente aplicables para pronosticar acerca de las metas del actual gobierno; por ello, pienso que el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación podría usarlas para develar, objetivamente y con participación de todos los sectores políticos de la nación, el camino a seguir, independientemente de los sesgos que, como los murciélagos ,a veces nos sobrevuelan y atemorizan.
Gustavo M. Astorquiza, P. Eng. normaandgus@easterlink.ca
Lluvias estivales
La semana pasada, llegaron los primeros atisbos de suaves lluvias estivales, aroma a petricor, "aroma a tierra mojada u olor a lluvia". Más contentos(as) aún, cuando la llovizna fue en la víspera del día 14 de febrero, en "El día de los enamorados", o el día de San Valentin.
La lluvia caída, fue un "respiro", una "bendición de Dios", especialmente, para la sufrida gente de la Península de San Ramón y Futa, azotados por los trágicos incendios.
La lluvia, también, dejó de manifiesto, especialmente para nosotros(as)los valdivianos(as), que está en nuestros ADN; somos hijos(as) de la lluvia, en las buenas y en las malas. En décadas pasadas, en pleno verano, eran normales, las esporádicas e intensas precipitaciones, que le llamábamos "espanta turistas"(visitas en carpas). Las primeras lluvias del año, nos invitan a compartir unos tibios mates, despiertan sentimientos de nostalgias, es vida, alegra el alma, calma, levanta los ánimos y florece el romanticismo.
¿Quién no escuchó "ese sonido de la lluvia que tiene un tintineo inconfundible, rítmico y sosegado que resonó en techos, puertas y cristales", mientras nos íbamos a dormir o al amanecer?
¿Recuerdan, cuando una vez, fuimos estudiantes, esos hermosos paseos de días de lluvias, bajo los añosos tilos, en la Plaza de la República, en busca de un amor, cantándoles al oído, a guisa de susurro, a nuestros pololos o pololas?, por ejemplo, la canción de The Ramblers, que dice: "Hoy han vuelto otra vez, los recuerdos con la lluvia, que se siente caer y yo sé, que al golpear tu ventana, en tus ojos también lloverá".
Luis Omar Sepúlveda Navarro doncoyosepulveda@gmail.com
Ajustes necesarios
En medio del escenario económico tras la pandemia, los proveedores del sector salud viven una fuerte crisis a nivel mundial.
En España, por ejemplo, las industrias que fabrican e importan equipamiento médico lograron que el gobierno reajustara los contratos para enfrentar el alza de costos por el
precio de materias primas, combustibles e inflación, lo que se repite en toda Europa.
En Chile los proveedores del sector público mantienen licitaciones que no ven reflejados el aumento de la inflación, tipo de cambio y fletes. Hay firmas que mantienen contratos con el Estado a largo plazo, pese a que los costos han subido. Es decir, trabajan a pérdida.
Para que esta situación no escale y afecte a los pacientes, es clave que el Minsal instruya a los hospitales y servicios para que apliquen la directiva número 40 que sugiere reajustar los contratos, la que no es vinculante y, por tanto, casi no se utiliza.
Estas condiciones están generando un clima discriminatorio hacia las Pymes, pues el Estado en sus licitaciones compra a menos competidores. El resultado: mayor precio y no un precio justo.
Eduardo del Solar Director ejecutivo de APIS Presidente Convergencia de Gremios PYMES de la Salud, Transportes y Cooperativas