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degradación de los hábitats. En total seleccionamos 100 puntos al azar, distribuidos entre las dos regiones. Es un tremendo trabajo, ya que van a ser 12 personas divididas en cuatro equipos las que en forma simultánea van a recorrer el territorio, desde San José de la Mariquina hasta Chiloé. La mitad de estos puntos está en ambientes de bosques continuos y los otros son ambientes fragmentados o destruidos por la actividad humana".
Y continuó: "Los animales se van a capturar siguiendo protocolos de bioética, se anestesian y vamos a tomar muestras de hisopado nasofaríngeo, también muestras de sangre y vamos a tratar con diferentes herramientas moleculares, de determinar aquellos patógenos que tenemos en esta zona del país y las medidas que debemos tomar. Vamos a encontrar seguramente hanta, rabia, tifus de los matorrales, que son enfermedades que están circulando hoy en día en los roedores, además de muchos otros patógenos que son de interés para la salud pública".
¿Por qué buscarán especies en ambientes degradados? Acosta explica: "Uno ve que generalmente los ambientes se degradan o destruyen para actividades como la agricultura, ganadería, plantaciones forestales, para caminos y nosotros nos acercamos mucho más a los animales silvestres. Al intervenir, lamentablemente lo que ocurre es que comienzan a dominar algunas especies silvestres, que justamente son los reservorios de patógenos".
Y complementó: "Por esto, dentro de las hipótesis que esperamos demostrar, es que en ambientes alterados vamos a encontrar muchos más patógenos que son peligrosos para el ser humano. Así queremos determinar aquellas áreas en que existe mayor riesgo de que estos patógenos salten al ser humano. Ojalá nos equivoquemos, pero la teoría indica que esas áreas que en están degradadas y donde interactuamos mucho más con los animales silvestres, están ocurriendo cambios ecológicos que faciliten la transmisión desde animales silvestres al ser humano".
Mientras que en relación a los nexos que mantiene el proyecto con servicios públicos y otros privados, el académico señaló que "dentro del proyecto tenemos vínculos con organismos públicos como el SAG, el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Salud y ellos van a estar al tanto de lo que vayamos encontrando. Obviamente, vamos a hacer recomendaciones desde la ciencia, pero luego las decisiones son tomadas a nivel político, por lo que esperamos desarrollar un trabajo en conjunto".
El profesional también destacó que "antes de este proyecto, lideramos una iniciativa que se llamaba Vigía Covid, en que salimos a testear en forma masiva desde Viña del Mar hasta Coyhaique, para detectar casos asintomáticos y prevenir brotes dentro instituciones o empresas. Esto es un poco lo mismo, tratar de prevenir antes de curar y para eso, este proyecto incluye también la formación de capital humano avanzado, estudiantes de pregrado y postgrado y de hecho parte del equipo que va a trabajar en terreno va a iniciar programas de doctorado. Este proyecto nace en la Universidad Austral, pero tenemos una red de colaboración con varias instituciones nacionales e internacionales, donde también hay colegas que están trabajando y van a trabajar con muestras que nosotros les vamos a proveer. La idea es que esto sea una base de colaboración importante para futuros proyectos a gran escala, un buen equipo colaborativo de alto nivel que podamos tratar de solucionar algunos problemas que ya nos están afectando".
Más detalles
Entre los propósitos más específicos de la iniciativa, se detalla que este proyecto busca entender el rol de cambio de uso de suelo como promotor de emergencia de patógenos en la interfaz silvestre, así como predecir la emergencia de patógenos, diseñar y diseminar conocimiento a tomadores de decisión y público general, para mitigar el riesgo de enfermedad, además de preparar a nuevas generaciones de investigadores que enfrentarán eventuales nuevas pandemias.
En esa línea, los objetivos específicos son determinar la influencia de degradación y/o fragmentación del hábitat en patrones espaciales de diversidad y riqueza de patógenos emergentes; construir modelos predictivos de emergencia de patógenos y transmisión intra/inter específica y diseñar mapas de riesgo; y transferir el conocimiento adquirido entre tomadores de decisión para su uso en el desarrollo de políticas de salud pública y diseminarlo al público general para prevención y autocuidado.
Con respecto a la metodología de investigación, también se detalla que se seleccionarán 100 sitios de muestreo en las regiones de Los Ríos y de Los Lagos, localizados en áreas de bosque continuo (50 sitios) y también en parches de bosque fragmentado inmersos en una matriz de paisaje agrícola-ganadero (50 sitios). Los individuos de roedores (Abrothrix Olivacea) serán capturados con trampas Sherman y se recolectarán muestras de raspados orofaríngeo y fecal para análisis de su microbioma y viroma. También se obtendrá muestras de sangre y orina para análisis de anticuerpos contra hantavirus e infección por leptospiras, respectivamente.
En el caso de los ejemplares de murciélagos (Myotis Chiloensis), serán capturados con redes niebla y se recolectará hisopados orofaríngeos y fecales. Además, se recolectará ectoparásitos de ambos mamíferos (garrapatas, pulgas y ácaros) para la detección de patógenos transmitidos por vectores. Para el perfil de los microbiomas, se realizará un metabarcoding para la identificación de bacterias en las muestras.
En relación al paisaje asociado a cada sitio de muestreo, se explica que será caracterizado mediante la estimación de Normalized Difference Vegetation Index (NDVI), mediciones de temperatura y humedad diarias, distancia a elementos antropogénicos más cercanos, proporción de tipos de cobertura de suelo y altitud y latitud, entre otros.
La integración de los datos permitirá determinar el impacto de la degradación del hábitat en la probabilidad de infección de patógenos. Para esto se utilizarán modelos mixtos lineales y generalizados, con el fin de evaluar los efectos del hospedero y ambiente sobre la diversidad y riqueza de virus/bacterias y la presencia de patógenos puntuales seleccionados. Para predecir la distribución de patógenos, se realizarán modelos de nicho ecológico para patógenos de interés.