María Alejandra Pino
Académicos e investigadores de la región respaldaron la carta firmada por integrantes de la comunidad científica nacional. La inserción "Nuestros gobiernos han elegido la ignorancia" fue publicada el domingo en los diarios El Mercurio y La Tercera y en ella apuntaron a que "el nulo aumento presupuestario a la ciencia para 2016 se suma a la disminución del número de becas y atraso de concursos. Además, el improvisado traspaso de la Iniciativa Científica Milenio a Conicyt y la reciente renuncia del Presidente de Conicyt confirman la total indiferencia frente a una temática que va a definir nuestro futuro".
Dos factores
El director de Investigación y Desarrollo de la Universidad Austral de Chile, dr. Hans Richter, se refirió ayer a la carta. Dijo que el análisis respecto a la molestia de la comunidad científica responde a dos factores: los recursos económicos y la institucionalidad.
"Los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) invierten en promedio 2.4% del Producto Interno Bruto en investigación, mientras que Chile está invirtiendo seis veces menos, un 0.39%", explicó.
Por otra parte, afirmó que la gestión que hoy realiza la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt) responde a un "modelo anticuado" y tiene poco peso político. Por lo tanto -concluyó- "se requiere una institución con rango ministerial. Por eso hubo una propuesta de la Comisión Nacional de Innovación para el Desarrollo, presidida por Gonzalo Rivas, orientada a que es necesario avanzar rápidamente hacia la creación de un Ministerio de Ciencia y Tecnología".
Hans Richter planteó que a pesar de que desde el año 2000 los gobiernos han expresado sus intenciones de aumentar la inversión en ciencia y tecnología, y que la combinación de esos dos factores son el anhelo de la sociedad científica, "en vez de caminar en esa dirección, la sensación que existe hoy día es que nos estamos alejando. Más allá del discurso y de lo que se manifiesta como intenciones, en términos reales hoy no tenemos la fecha para la creación de ese Ministerio".
En ese sentido y relevando el rol de la ciencia, Richter planteó que Chile vivió un episodio históricamente complejo cuando el salitre fue reemplazado por los fertilizantes artificiales y que en el caso de que se produjera una situación similar con el cobre significaría una tremenda crisis para el país. Entonces -puntualizó- "la única forma de prepararse para estos escenarios adversos es potenciar la investigación, la innovación y la tecnología".
En esa línea, dijo que "estamos hablando de hacia dónde camina Chile y qué herramientas vamos a utilizar para impulsar un desarrollo efectivo y no seguir siendo mono productores o una matriz exportadora de baja complejidad".
"señales erráticas"
La carta de la comunidad científica nacional fue firmada también por académicos e investigadores de la Uach. Entre ellos el profesor auxiliar del Instituto de Fisiología de la Facultad de Medicina, Gonzalo Mardones, quien dijo que no se trata de un problema de falta de apoyo a la comunidad científica sino de falta de institucionalidad.
Sin bien señaló que su trabajo como investigador lo ha podido desarrollar a pesar de ello y que cada año se reparten recursos a los actores involucrados en impulsar la ciencia, la tecnología y la innovación, "una o varias cajas repartidoras de recursos no son suficientes para que la comunidad científica y tecnológica colabore en pos de sacar a Chile del subdesarrollo. Necesitamos una estructura que no se vea afectada por el gobierno de turno, con planes a corto, mediano y largo plazo. Esto no existe", afirmó.
Agregó que: "Desde el fin de la dictadura, todos los gobiernos han dado muchas señales, pero lamentablemente en su mayoría han sido erráticas e inconsistentes. Pero este no es un problema de los gobiernos, este es un problema de la nación y es por el bien de Chile que todos nos involucremos para ser parte de la solución".
En tanto, la dra. Carola Otth, del Instituto de Microbiología Clínica de la Facultad de Medicina enfatizó que la importancia que el gobierno da a la ciencia e innovación como una forma de avanzar y construir un país desarrollado "es nula".
Además, señaló que "cada vez el sistema está más competitivo por un mayor número de investigadores que retornan de sus becas de postgrado intentando aportar al país, compromiso exigido por las becas de doctorado en el extranjero, lo cual genera un gran número de proyectos de excelente calidad que quedan sin financiamiento. Esto sumado a las fluctuaciones anuales en el número de becas y de proyectos aprobados, lo cual no asegura la continuidad de algunas iniciativas".
"No es una prioridad para el gobierno"
En la cuenta pública de este año, la Presidenta Michelle Bachelet anunció la creación de un Ministerio de Ciencia y Tecnología. La senadora Ena von Baer informó que no hay avances acerca de esa iniciativa y que "se entiende la molestia de la comunidad científica, porque no está claro cuál va a ser el planteamiento del gobierno de la Presidenta Bachelet respecto a una política tan importante (...) Para el gobierno no es un tema prioritario y eso se nota también en el Presupuesto 2016 para Ciencia y Tecnología".
"La Uach está viviendo una etapa contra cíclica, estamos desarrollando proyectos en números adecuados; sin embargo la incertidumbre no es el presente sino el futuro".
Hans Richter, Dir. de Investigación y Des. Uach