Archivo para la historia regional
Un proyecto para digitalizar importantes documentos sobre el surgimiento de la Nueva Región fue presentado al Core. Apoyarlo es, sin duda, algo necesario. Luego del archivo digital, debiera trabajarse en escribir la historia local y en crear una narración que sirva para la enseñanza cívica en los colegios locales.
El 16 de marzo próximo se cumplirán diez años desde que la Presidenta Michelle Bachelet firmó en Valdivia el decreto que creó la región de Los Ríos. Una hermosa ceremonia frente al muelle Schuster, multitudinaria y llena de emociones, marcó ese paso importante, que dio inicio a la instalación del gobierno regional, que finalmente se constituyó el 2 de octubre de 2007.
Recordar ese hito permite comenzar desde ahora a celebrar el décimo aniversario de Los Ríos, que llega en un momento importante para la descentralización del país, con la reciente aprobación de la elección directa de intendentes, proceso al que aún le faltan varios pasos, pero que puede significar el inicio de una autonomía mayor para las regiones.
En este contexto resulta muy interesante el anuncio realizado hace pocos días respecto de la digitalización de documentos que pertenecieron a don Raúl Basso, líder del movimiento Nueva Región, quien atesoró cada uno de los pasos dados durante más de treinta años hasta lograr la autonomía de la antigua Provincia de Valdivia.
Ese valioso material se encuentra hoy al cuidado de su familia, pero al ser incorporado a un archivo regional, quedaría a disposición de la comunidad a través de la Biblioteca Nacional Digital.
Treinta millones de pesos cuesta el proyecto, que deberán ser financiados a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), como un aporte a la preservación de la memoria de un proceso histórico y único en su desarrollo.
Es de esperar que la propuesta llegue a buen término, se forme un archivo y desde él comience el trabajo en escribir la historia del surgimiento de la región, que aún se encuentra pendiente. No existe un documento oficial donde se narre ese logro comunitario, que bien podría ser utilizado en los colegios locales para apoyar los contenidos de educación cívica. Esa enseñanza -según las disposiciones ministeriales- puede ser asumida en cada establecimiento como un elemento transversal del currículo y, en nuestra zona, debiera estar presente en la formación de las nuevas generaciones, porque constituye un verdadero ejemplo de participación ciudadana.