"Deportes Valdivia me dio la oportunidad de reinsertarme en el fútbol de Primera B"
Enero de 2001 marcó el primer encuentro de Richard Leyton Abrigo con Valdivia. En la segunda quincena de ese año llegó bajo los tres palos de Colo Colo para jugar el Mundialito de la Escuela de Fútbol de la U. Austral.
Enero de 2007 marcó otro eslabón en su carrera. Comenzó como titular de Chile en el Sudamericano Sub-20 de Paraguay, junto a Arturo Vidal, Alexis Sánchez, Gary Medel y la generación que llevó a la Roja al tercer lugar en el Mundial de Canadá. Pero, en la hora definitiva el DT José Sulantay no volvió a requerir de sus servicios.
Luego de completar inferiores en el club albo, comenzó un viaje que lo llevó a Deportes Puerto Montt (2008-2009), Santiago Morning (2010), Ñublense (2010), San Luis de Quillota (2011), Coquimbo Unido (2012-2014), Curicó Unido (2014-2015), Malleco Unido (2015-2016) y Deportes Valdivia para la temporada 2016-2017 en Primera B.
BUEN AÑO
¿Cuál es el balance de la campaña del equipo?
-Como equipo, se cumplieron las expectativas e incluso se superaron. En el ambiente del fútbol, pensaban que íbamos a ser un exclusivo colista. Los especialistas y los programas de TV de Primera B nos daban como uno de los colistas. Con los resultados a la vista, el balance es bueno y los resultados son aceptables para el debut del club en la división, a 14 puntos del colista. Se cumplieron los objetivos de la institución, que no eran mayores, en relación a la complicada situación económica del comienzo.
¿Y el análisis de tu rendimiento personal?
-Estoy agradecido por la oportunidad que me dio la institución, de reinsertarme. Venía de jugar en Segunda División y Deportes Valdivia me abrió las puertas. Comencé y terminé jugando. Mantuve una regularidad, con errores a los cuales está expuesto cualquier arquero, pero contento por el año deportivo. Era lo que quería y lo que esperaba.
Tienes contrato hasta fin de año. ¿Cuáles son tus expectativas?
-Hoy me debo a la institución. Si aparecen otras posibilidades, las puertas están abiertas, por un tema de crecimiento personal y económico. A los 30 años debo pensar más en lo que viene, que en vivir el momento, por el tema familiar. Si se da la posibilidad de ir a un club más grande, de Primera División o del extranjero, tengo que estar abierto a esas posibilidades.
¿Te acostumbraste a Valdivia?
-Desde el primer momento. Unos meses antes de que se diera la posibilidad de venir, estuvimos con mi pareja en un seminario de activación de la glándula pineal y comentamos que sería lindo vivir en Valdivia. Esta ciudad tiene una calidad de vida extraordinaria y venirnos, nos ayudó mucho como familia.
¿Cómo ha sido tu relación con el hincha valdiviano?
-De la mejor. Uno sabe que está expuesto a la crítica, de acuerdo al rendimiento deportivo. Además estamos expuestos a las redes sociales, donde cualquier persona puede opinar y sin siquiera ir al estadio. Con los años de experiencia, hay que ir dejando esas cosas de lado, para que no te afecten como persona, tanto los halagos -que son perjudiciales- como las críticas. Es mejor tener los pies sobre la tierra en las cosas positivas y las negativas. No vivo pendiente de las redes sociales, por lo mismo. En Deportes Valdivia tocamos piso durante gran parte del torneo y hubo otro momento en que anduvimos muy bien. Para ambos casos, creo que no es bueno estar pendiente de lo que pasa o se dice en las redes sociales.
Trabajo
¿Fue muy notorio el cambio de técnico, de Lunari a Cavalieri o de todas maneras, en algún momento el equipo iba a despegar, independientemente de quien fuera el entrenador?
-Los resultados muestran que la llegada de Cavalieri fue beneficiosa y marcó un antes y un después en el equipo, en la manera de jugar, sin menospreciar lo que hizo el profe Lunari, que es un gran entrenador y persona. Pero, por su manera de trabajar con un equipo joven, iba a ser difícil despegar.
¿Y el cambio de Cavalieri a Rojas?
-Son visiones similares de fútbol. Quizás los manejos de grupo no son iguales y eso tendrá que verlo Claudio (Rojas) con su cuerpo técnico. Además quedaban cuatro partidos cuando llegaron. Ahora, Claudio tendrá que demostrar qué es lo que le gusta como entrenador para sus equipos.
¿El manejo de este grupo es complicado o el manejo en general en el fútbol?
-Me refiero a que hay 28 o 30 personalidades, todos quieren jugar y el tema de los egos es muy poderoso en el fútbol. Todos creen que son los mejores y en eso, el técnico tiene que estar muy cerca, más allá de lo que hayan hecho Lunari o Cavalieri o que pueda hacer Rojas. De ese manejo de grupo depende el éxito global.
¿Es importante la presencia de un preparador de arqueros?
-Sí. Hoy, prácticamente todos los clubes lo tienen incorporado. El puesto de arquero es tan específico y distinto y tiene tareas específicas que debe llevarlas alguien capacitado. Uno no termina de aprender y corregir, aunque tenga 30 años. El preparador es fundamental, desde la formación hasta la edad adulta. Si no, vean lo que pasa hoy en Colo Colo. No es igual la visión de un técnico a la de un preparador de arqueros.
¿Los centros siempre han sido un problema para ti?
-Hay un tema de confianza, de coordinación, de posición, que los trabaja un preparador de arqueros. Uno puede trabajar temas específicos, pero no es lo mismo a que alguien esté a cargo de los trabajos, porque el grado de atención del grupo de arqueros es distinto y eso debe trabajarlo un especialista.
Debutaste a los 19 años en Colo Colo, con Claudio Borghi como entrenador. ¿Por qué no lograste consolidarte?
-Tomé malas decisiones. Debuté a los 19 años, partí jugando el Sudamericano Sub-20 del 2007 en Paraguay, clasificatorio para el Mundial de Canadá, pero comenzamos mal, me reemplazó Toselli y clasificamos al Mundial. Cuando volví a Colo Colo, me ofrecieron ir a préstamo a Cobresal y no quise, porque esperaba una oportunidad en Colo Colo, estar de segundo arquero. Pero, trajeron a Sebastián Cejas, estaba Rainer Wirth, quedé de tercero y a veces de cuarto arquero. Quise quedarme en Santiago por la preparación de la selección, pero justo cuando fue el primer llamado para ir a Canadá estuve citado a un partido de la Copa Libertadores y no pude asistir a ese primer llamado. Después, no aparecí nunca más en un llamado y viajaron Toselli, Veloso y Valladares.
De la Fuerza Aérea hasta el Torreón
Richard Leyton recuerda que empezó a jugar a los nueve años en una escuela de fútbol de la Fuerza Aérea, con el entrenador Osvaldo Jerez. Después, fue captado por una filial de Colo Colo y finalmente integrado a las series menores del conjunto popular. Y antes de su llegada al Torreón en 2016, sostuvo conversaciones el año 2015 con José Gandarillas (presidente) y Martín Tupper (gerente): Siempre me dijeron las cosas de frente y me dieron una grata impresión. En el fútbol, se valora a le gente que habla y actúa de manera frontal. Después, estaba en el listado de posibilidades y llegué al club".
"Como equipo, se cumplieron las expectativas e incluso se superaron". "El puesto de arquero es específico y distinto y tiene tareas específicas, que debe llevarlas alguien capacitado".
Richard Leyton, Arquero de Deportes Valdivia"
años tiene el portero del Torreón, Richard Leyton. Nació el 25 de enero de 1987 y mide 1.87 metros. 30
de octubre de 2006 lo hizo debutar en Colo Colo el técnico Claudio Borghi, en un partido ante Cobreloa. 22
fue el año del primer contacto de Leyton con Valdivia, cuando jugó el Mundialito de la Uach. 2001
"
Bien por Messi y Argentina, pero es una pena que las reglas no sean iguales para todos..."
arturo vidal, volante chileno del Bayern Munich.