El lanzamiento de la campaña "Valdivia: lluvia es vida" en Santiago y la presentación de la temporada de nieve en Huilo Huilo, son dos importantes hitos para fomentar el turismo invernal en la región de Los Ríos, poniendo énfasis en las características que esta época tiene en la zona y que la hacen atractiva.
La idea es invitar a los visitantes a disfrutar de aquellos elementos que en otras regiones podrían resultar un freno para la entretención, los paseos o la apreciación del paisaje. En cambio aquí, se convierten en factores que suman. En otras palabras, una dificultad se convierte en una gran oportunidad.
Ambas iniciativas, sumadas a otras que realizan las diferentes comunas, son oportunas en la tarea de romper con la estacionalidad o, al menos, disminuir las brechas de actividades que se registran entre diferentes períodos del año. Además, ellas se producen coincidiendo con las vacaciones escolares que se han convertido en una temporada de viajes para numerosas personas en Chile. Solamente en la región hay 79 mil niños y niñas haciendo uso de sus días de descanso y ofrecer entretención y esparcimiento para ellos, es un desafío interesante. Parques, cines, alojamientos cercanos, piscinas temperadas, centros deportivos, granjas educativas, clases de artes, programas cortos de turismo interno, excursiones aunque el pronóstico sea un pequeño temporal, son alternativas que las familias pueden considerar en este tiempo y que ciudades como Valdivia deben incluir entre sus "imperdibles". Por supuesto que los eventos llaman la atención y deben estar presentes en el calendario, pero una parrilla constante de servicios de calidad y precios justos, se hacen también muy necesarios.
Sin duda la iniciativa municipal de difundir los atractivos de la lluvia, resulta un acierto; lo mismo con en la reserva de Panguipulli, convertida ya en un destino de renombre internacional. Pero todo ese esfuerzo debe ir acompañado de una buena recepción comunitaria a los visitantes, con atenciones eficientes y amables. Si ese elemento se encuentra presente, se multiplican las probabilidades de que un turista regrese, tanto en invierno como en verano.