
Críticas de Chile Sustentable
La directora de Chile Sustentable, Sara Larraín, manifestó en una entrevista con T13 Radio que el Presidente no era claro al momento de presentar el plan. "Tampoco han sido transparentes de cómo se va a pagar esto, no ha sido transparente qué centrales se van a cerrar entre el 2025 y el 2040, no ha señalado cuál es el pago que vamos a hacer". Agregó que las centrales que serán cerradas en una primera etapa son mantenidas por el pago de potencia, aunque ya no sean relevantes.
La ministra Susana Jiménez explica el cronograma de descarbonización
ENERGÍA. La secretaria de Estado indicó que algunas centrales a carbón se mantendrán en estado de "reserva" y que podrían volver a funcionar en caso de que sea necesario enfrentar una sequía o una falla en una planta más moderna.
La ministra de Energía , Susana Jiménez, defendió ayer el plan de descarbonización anunciado por el Presidente Sebastián Piñera y rechazó las críticas al cronograma anunciado. La autoridad indicó que el cronograma no se hizo cerrado hasta 2040, porque cada cinco años se quiere observar cómo avanza la tecnología en el sector para hacer los ajustes en función de ello.
El cronograma comienza con el cierre de ocho termoeléctricas en un periodo de cinco años, proceso que partió este mes con las plantas 12 y 13 en Tocopilla. Para 2040 se pretende que estén cerradas las 28 centrales de este tipo del país.
Explicó por qué el plan no se realizó hacia 2030, otro de los focos de críticas: "Suplir 5.500 megas de energía, que es el parque total de carbón, con nuevas energías requiere de inversiones tremendas en generación. Inversiones que suponemos serán solar en el norte, pero también eólica, hídrica, geotérmica, etc", dijo Jiménez en el programa Mesa Central de Canal 13.
"Lo que promueve esto es un compromiso ambiental, reducción de gases de efecto invernadero, reducción de contaminantes (...) es muy importante garantizar que esto no afectará ni la seguridad del suministro ni el costo de la energía", dijo la autoridad
En el caso de existir alguna emergencia con las plantas termoeléctricas más modernas, el Gobierno planteó que junto con el cese de operaciones hay un estado operativo llamado "reserva estratégica". Esto significa que las centrales que estén fuera de operación, hasta por un periodo de 5 años, pueden ser llamadas a funcionar por el Coordinador Eléctrico Nacional ante una situación de emergencia, como una sequía prolongada o una falla de otra central.
La ministra agregó que estas plantas deben estar disponibles en un plazo de 60 días a partir del "mandato del Coordinador". La secretaría de Estado recalcó que la mantención de una central que puede funcionar en casos de emergencia también tendrá un costo.
Asimismo, señaló que no todas las centrales que dejen de funcionar podrán servir como reserva porque "les sale más costoso mantenerse en el estado operativo (de reserva) que el ingreso que reciben por la potencia. Lo que estoy diciendo acá es que se les va a reconocer un porcentaje para que se mantengan en esa condición en caso de tener una dificultad (...) que va a ser el 60% del pago potencia que se recibe en régimen".
Debate
Ante las críticas de Sara Larraín, directora de Chile Sustentable, quien señaló que considera mejor la reconversión a gas, la ministra de Energía dijo que esa opción es posible, pero aseguró que es mejor el retiro antes que la conversión. "Si las reconvierto a gas, es verdad que se reduce las emisiones pero no a cero como es con cese de operaciones (...) este plan es mucho más fuerte", explicó Jiménez.
"Hemos sido enfáticos en decir que este es un acuerdo responsable, primero porque se ha hecho un anuncio público, se han firmado acuerdos", aseguró la ministra.
Se pretende que en mayo de 2020 se terminen las funciones de la planta Tarapacá en Iquique. Luego, a finales de 2022, se estima el cierre de la central Ventanas U1 en Puchuncaví. Para 2023 está contemplado el cierre de Bocamina U1 en Coronel. En 2024 se estima que terminen las funciones de gran parte de las centrales programadas en este primer periodo, dos más en Tocopilla y una en Puchuncaví.
50% de las centrales que cerrarán en esta primera etapa están en Tocopilla.
60 Le sigue Puchuncaví.