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Presidente de Ecuador: "Se eliminó el subsidio, se acabó la zanganería"

TENSIÓN. Lenín Moreno dijo que mantendrá eliminación del subsidio de combustibles, medida que desató fuertes protestas en las calles, tras lo cual dictó estado de excepción. "Le quedó inmenso el traje de Presidente", criticó Rafael Correa.
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El Presidente de Ecuador, Lenín Moreno, insistió ayer que mantendrá la eliminación al subsidio de los combustibles, medida que tomó en el marco de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que desató el jueves la protesta de los transportistas.

"Bajo ninguna circunstancia vamos a cambiar la medida, que se oiga bien, no voy a cambiar la medida. Que quede claro, se eliminó el subsidio, se acabó la zanganería, y de aquí en adelante vamos construyendo el nuevo Ecuador que todos anhelamos y soñamos", dijo tajante el jefe de Estado.

Desde Guayaquil, hasta donde se trasladó el jueves tras decretar el estado de excepción en el país, Moreno reiteró, no obstante, su disposición al diálogo. "¿Conversar? Claro que sí. Habrá mecanismos de paliar un poco el efecto que pueda haber en algunos sectores, y estamos dispuestos a hacerlo", comentó, aunque aclaró que no dará marcha atrás en su decisión de eliminar el subsidio, que representa ingentes recursos al país.

De acuerdo al gobernante, el subsidio a los combustibles es "nocivo para la economía" pues "aproximadamente 60 mil millones de dólares ha perdido el pueblo ecuatoriano" por ese rubro a lo largo de cuatro décadas. Comentó que el dinero que se destinaba a los subsidios se usará ahora exclusivamente para temas de seguridad, salud y educación.

El valor del galón de diésel pasó de 1,03 dólares a 2,27, mientras que el de la gasolina conocida como "extra", la de mayor consumo en el país, se elevó de 1,85 a 2,3 dólares.

Moreno, que el jueves apuntó que "a los golpistas les decimos que no", aseguró ayer que está abierto a las opiniones y críticas, pero llamó a la población a "poner los pies en la realidad, y sepamos exactamente a qué nos habíamos enfrentado: no queremos beneficiar a los que más tienen, no queremos beneficiar a los contrabandistas… No me pidan que dialogue con los contrabandistas que se han enriquecido pasando combustibles hacia países vecinos y, de esa forma, estafando la confianza de los ecuatorianos".

Luego, recalcó que estará "encantado" de dialogar con quienes quieren sacar el país adelante, pero no en base a hechos consumados, como la paralización del transporte que comenzó el jueves.

La decisión de Moreno fue rechazada por el expresidente Rafael Correa, quien lo responsabilizó por la "crisis moral" que sufriría el país. Correa defendió que "Ecuador tiene mecanismos constitucionales para superar tanta conmoción", mencionando artículos de la Carta Magna, uno que permite cesar al Presidente en caso de "grave crisis política y conmoción interna", lo cual obliga a convocar elecciones, y otro que habla de la facultad presidencial de disolver el Parlamento y convocar elecciones anticipadas por la misma razón. "A Moreno le quedó inmenso el traje de Presidente", comentó Rafael Correa.

Bajan movilizaciones

Ecuador afrontó ayer su segundo día de estado de excepción decretado por el Gobierno, con una disminución en la intensidad de las manifestaciones contra la eliminación de subsidios a los combustibles.

"Hoy (ayer), la casi totalidad de Ecuador está haciendo sus actividades en paz", dijo Lenín Moreno, antes de mostrar su satisfacción por "la respuesta inmensa, mayoritaria del pueblo ecuatoriano para apoyar una decisión valiente del Gobierno".

La ministra de Gobierno, María Paula Romo, dijo que seguía habiendo bloqueos en algunas vías, pero que varias provincias estaban volviendo a la "normalidad". Informó que, hasta ayer a mediodía, 59 policías habían quedado heridos en las protestas y 350 personas habían sido detenidas, incluidos dirigentes del transporte.