Ayer al mediodía los comerciantes de la feria Persa de Valdivia realizaron una protesta pacífica en el frontis de sus dependencias, en calle Yungay, ocasión en que se quejaron por la falta de mantención y las malas condiciones de sus puestos.

En este contexto, hicieron un llamado a la municipalidad de Valdivia a poner sus ojos en las necesidades que presenta el galpón que los alberga hace 30 años, abogando también por transparentar los detalles del proyecto de reposición del lugar.

"Estamos trabajando en condiciones precarias, pero tenemos que hacerlo para comer", expresó Isaías Oliva, uno de los manifestantes, quien aseguró que "sólo pedimos una respuesta clara".

La municipalidad no emitió comentarios al respecto.