Unido y sin partidos
Una de las características principales de la revuelta social en curso es su carácter no partidario y en gran medida espontáneo. Es un movimiento que se identifica con distintos estamentos de la sociedad civil y se distancia categóricamente de las organizaciones políticas, con su consigna "El pueblo, unido, avanza sin partidos".
No podría ser de otra manera en momentos en que todas las instituciones y organizaciones políticas, partiendo por el gobierno y el parlamento, se encuentran en su momento de mayor desprestigio. Sólo un 13 % apoya la gestión del presidente Piñera, según la encuesta Cadem. Y, peor aún, las expectativas con respecto a quien lo sucederá en el cargo también caen en picada. Todos los aspirantes presidenciales disminuyen su apoyo, según la misma encuesta. Un 57 % no tiene candidato y un 66 % no sabe quién será el próximo primer mandatario.
Esta situación de anomia total, destacada como meritoria por distintos analistas, pone por cierto de relieve el papel de la sociedad civil, pero no deja de tener aspectos inquietantes. Porque si los actores políticos no entregan respuestas convincentes a la crisis -y hasta ahora no las han entregado- se puede crear una situación de vacío de poder altamente riesgosa.
Como lo demuestra la historia reciente hasta la saciedad, siempre hay alguien que llena estos vacíos. Y no son precisamente los movimientos sociales. Si la crisis se prolonga, se podrían abrir paso soluciones populistas insospechadas o incluso podría darse lo que algunos análisis definen como "salida autoritaria" (ominoso eufemismo chileno para referirse a dictadura). Normalmente, un momento electoral sirve para que se desarrollen y aglutinen nuevas opciones políticas que ofrezcan soluciones realistas. Lamentablemente, las próximas elecciones tendrán lugar en un año más y es probable que sea demasiado tarde para lograr esa función catalizadora.
Jorge Gillies Académico Utem
Asambleístas
Los que están pidiendo Asamblea Constituyente deberían preguntarse:¿cuántos van a ser sus miembros?, ¿cómo van a ser elegidos?, ¿cuánto tiempo van a durar?, ¿cuánto les pagarán? Si no se contestan estas preguntas lo más probable que la Asamblea Constituyente se transforme e un congreso de consuelo que sirva para colocar a todos los políticos que quedaron cesantes en la última elección y el gasto lo pagaremos una vez más aquellos que trabajamos.
Eduardo Navarrete Melo eduadonavarretemelo@gmail.com
¿Dónde estaban?
Repican voz en cuello, como loros choroy, esos bulliciosas, que no escucharon a la gente. Al pueblo. Y que la "clase política está en deuda". Como si ellos no fueran parte del descalabro nacional.
Botones. El 22 de abril de 2018 miles y miles marcharon por Santiago y regiones bajo la consigna "No + AFP". Un poco antes, el 18 de abril de 2018, una multitudinaria marcha de estudiantes y profesores recorrió Chile, reclamando no al lucro, no a la corrupción (le costó el puesto al ministro Varela). Y hace poco, el 10 de octubre, 200.000 personas marcharon en Osorno contra la empresa Essal por no entregar un servicio vital durante ¡14 días! ¿No escucharon? ¿No vieron? ¿Dónde estaban los representantes de todos esos marchantes?
Gaspar Millas del Río gasparmdelrio@gmail.com
Alcalde Mitre
Las cualidades humanas de la empatia con lo social, lo diligente, lo trabajólico se transforman en causas que en el tránsito de la vida la afectan y que emiten señales importantes de percepción a tomar en consideración.
La brújula de trabajo ha resentido la salud de un buen hombre, servidor público de por vida. Me refiero a aquel compañero liceano de la década de los 70 y actual alcalde de Mariquina, Guillermo Rolando Mitre Gatica. Estoy pleno que más temprano que tarde volverá con los mismos bríos y tesón de siempre para continuar su tarea en favor de sus vecinos y vecinas de la pujante y próspera tierra de Mariquina. ¡Vida y salud, viejo Queule. De seguro te repondrás pronto!
Boris Segovia Bruzzone segoviabruzzone@gmail.com
Acción policial
Al ver las imágenes de la destrucción llevada a cabo en el centro de nuestra ciudad y en contra de elementos o comercio que nada tienen que ver con las peticiones que se hacen me pregunto dónde están las fuerzas de orden y seguridad, o sea Carabineros. ¿Están acaso sobrepasadas por los manifestantes? La verdad es que no lo creo así, son personas altamente entrenadas y equipadas para enfrentar este tipo de acciones. La otra alternativa es que se deba a la desidia de Carabineros debido al nulo respaldo que reciben desde la clase política y del gobierno. Desgraciadamente se está perdiendo el estado de derecho y quienes deben velar por mantener ese estado de derecho han sido abandonados a su suerte.
Felipe Ramírez feliperamirezcofre@gmail.com