"Ha habido repartición de canastas, pero parece que son escasas comparativamente para la situación…"
— Ex Presidenta Michelle Bachelet — Por situación en Chile"Tengo gran respeto por la Presidenta, pero siempre es más fácil opinar de afuera que estando adentro…"
— Ministro Ignacio Briones — Por palabras de BacheletEl próximo 8 de junio, se cumplirán seis meses desde que la Organización Mundial de la Salud informó de la aparición del primer caso de Covid-19. Desde aquel momento, la cotidianidad de todas las personas en el mundo ha cambiado en distintos aspectos, comenzando por el distanciamiento social, el uso de mascarillas, el confinamiento, hasta lo que está significando para muchos la pérdida de su trabajo, o el cierre de sus empresas.
Toda esta realidad, ha puesto de relieve el tema del autocuidado y sus efectos positivos, tanto en lo personal, familiar y de toda la sociedad. En ese sentido, debemos señalar que la Organización Mundial de la Salud definió el autocuidado, en el año 1998, como "todo lo que hacemos por nosotros mismos para establecer y mantener la salud, prevenir y manejar la enfermedad".
A partir de esta definición, podemos ver que el autocuidado implica tanto la salud física como mental, y a los cuales hoy más que nunca debemos atender. En ese sentido, desde distintas organizaciones se están levantando iniciativas que apuntan a ese tema y que aprovechan las herramientas que nos da la tecnología. Por ejemplo: talleres de deporte, clases de salud nutricional, cocina, música, etc. En el caso de Santo Tomás, esta semana se presentó un programa nacional de Bienestar y Salud Mental, que surge de las inquietudes de los propios estudiantes y que permitirá la entrega de apoyo y herramientas para fortalecer el autocuidado y bienestar de los alumnos, por medio talleres de promoción de salud mental y bienestar, talleres de apoyo emocional en contextos de Covid-19, y dispositivos psicológicos en formatos de cápsulas y charlas.
Todos estos programas e iniciativas, sin lugar a dudas, están contribuyendo al autocuidado, porque debemos tener claro que no es solo el Covid-19 el peligroso, sino todos los efectos que puede provocar en nosotros los altos grados de estrés a los cuales nos estamos viendo expuestos.
Pero este autocuidado, también implica la realización de esfuerzos personales en materia de prevención, adoptando todas las medidas que nos entrega la autoridad de salud de manera diaria, porque el respeto por la distancia física, el lavado correcto de manos y el uso de la mascarilla es uno de los mejores ejemplos de nuestro autocuidado y del respeto y cariño que tenemos por los demás.
Laura Bertolotto Navarrete
Rectora Santo Tomás Valdivia
Las mayores tragedias, ya sea por obra de la naturaleza o por la mano del hombre, son sinónimo de dolor y desilusiones, pero también sirven para el recuerdo y, sobre todo, como enseñanzas para evitar o atenuar sus consecuencias.
Por lo tanto, es conveniente mantenerlas permanentemente en la memoria de quienes las soportaron y también de sus descendientes, para que traten de no cometer los mismos errores y para que tengan presente lo dura que puede ser la vida.
Es por ello que cobran importancia los museos o memoriales, que muchas veces son instalados en el lugar mismo donde se produjo la desgracia, o bien se les monta en un punto que facilite la llegada de visitantes. En países que hace algunas décadas estuvieron sumidos en los horrores de grandes guerras, son frecuentes estos recintos dedicados a minimizar las posibilidades de que vuelvan a ocurrir.
También los sucesos naturales deben ser permanentemente recordados.
Por lo mismo, sería importante que Valdivia cuente con un museo acorde a lo que ocurrió el 22 de mayo de 1960.
Hasta el momento, los homenajes a las víctimas del mayor cataclismo de la historia se limitan a los aniversarios y al trabajo de los científicos dedicados al estudio de estos fenómenos, pero la ciudadanía se mantiene demasiado alejada, como pensando que es muy difícil que se repita.
A medida que pasa el tiempo, la misma naturaleza nos deja con menos testigos o protagonistas de la tragedia, lo que significa que sus testimonios van desapareciendo. No se debe olvidar que en 1960 las posibilidades de contar con registros tecnológicos eran mucho menores que las de hoy, así que la versión oral de los hechos ha cobrado mucha relevancia a lo largo de estos 60 años.
Sin embargo, hoy se cuenta con los medios para montar un museo a la altura de aquellos acontecimientos, en base a lo que se captó en fotografías, los recuerdos de los sobrevivientes, documentos oficiales, prensa y restos materiales que aún permanecen en pie. Es posible y hay que pensar en ello, cuando sea oportuno.
Nada menos que 50 mil unidades de la especie loco llevaba un camión que fue interceptado por carabineros de la Tenencia de Carreteras de Paillaco. Con este golpe a la mafia del loco, la cantidad de moluscos decomisadas llega a 188 mil en lo que va del año, una cifra superior a las 152 mil requisadas durante todo el año anterior.
Ambas policías andan tras los pasos del autor del homicidio del destacado basquetbolista Carlos Ahuile. Ya se estableció que la noche del crimen, que ocurrió a la salida de un pub de calle Caupolicán, hubo riñas al interior del centro nocturno y en plena Plaza de la República, donde se registró una pelea entre conscriptos.
Los "rucos" fueron construcciones muy precarias que sirvieron para albergar a familias que quedaron sin vivienda por el terremoto de mayo de 1960. Ayer, los "rucos" volvieron a la ciudad, pero a la costanera, donde se montó una exposición fotográfica y de textos de gran tamaño para recordar lo que significó la tragedia