Estudian cómo cultivar el palo negro para potenciar su comercialización
CIENCIA. Investigadores de la Uach buscan mejorar su manejo y fomentar la producción de esta planta que se destaca por sus atributos saludables y por generar interés en el extranjero.
El palo negro es un arbusto que crece bajo los bosques nativos chilenos, entre las regiones del Maule y Los Lagos. A partir de la década de los '80 comenzó a generar un gran interés, especialmente para los científicos y los emprendedores, ya que algunos estudios realizados por la Universidad Austral de Chile en animales demostraron que tiene propiedades anticancerígenas. Luego de esos hallazgos los estudios continuaron y al descubrimiento de esas propiedades se sumaron otras: las antidiabéticas y antiinflamatorias, características que despertaron un interés comercial por la planta.
Sin embargo, aún se desconocen muchos aspectos de este arbusto nativo, por ejemplo, cuáles son las mejores técnicas para cultivarlo, propagarlo y potenciar sus propiedades saludables.
Ante esto un grupo de investigadores de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la Universidad Austral de Chile se encuentra desarrollando un estudio que busca desarrollar un paquete tecnológico para su cultivo, manejo y producción sostenible, todo esto con fines comerciales. Esto es impulsado por la Fundación para la Innovación Agraria (FIA).
El coordinador del proyecto es el director ejecutivo del Centro Experimental Forestal de la Uach, Felipe Leiva, quien explicó que la recolección del palo negro se hace mayoritariamente a partir de poblaciones naturales, lo que implica problemas en el rendimiento y también que esas poblaciones se puedan ver afectadas por la falta de manejo. Relató que hace unos años la empresa Agrícola Los Esteros comenzó a comercializar de manera formal el palo negro y fomentó la generación algunas plantaciones, pero sin conocer su biología y requerimientos fisiológicos. "Estas plantaciones fueron hechas adaptando lo que se hace con otras plantas, como el arándano. Eso implica que los rendimientos no son los que uno podría esperar. Debido a esto, la empresa se acercó a la universidad para ser asesorados sobre todo en propagación. De esta relación empezaron a surgir preguntas de parte nuestra que no eran posibles de contestar, así que decidimos estudiar y conocer sus mejores condiciones de cultivo", dijo. Sobre todo, porque los productos generados en base a esta planta tienen altas posibilidades de ser exportados y también porque este recurso puede ser una buena alternativa para los pequeños productores, quienes podrían reemplazar cultivos tradicionales de baja rentabilidad.
Los objetivos
Comenzaron a trabajar en diciembre de 2019 en cuatro áreas. En cuanto al mejoramiento genético buscan seleccionar y propagar genotipos aptos para el cultivo comercial, lo que implica identificar individuos con un buen potencial de crecimiento en terreno para propagarlos y evaluarlos. "En esto hemos avanzado bastante. La selección ya está hecha y hemos podido colectar más del 60 por ciento de ese material, el que tenemos en los invernaderos para formar plantas madre. En primavera deberíamos terminar de colectar y propagar", dijo Leiva.
El segundo objetivo tiene que ver con la molécula activa de la planta, la leptocarpina, que la dota de características saludables. "Esta planta se comercializa como planta completa, la colectan en terreno y la trituran. Lo que tú compras es un mix de ramitas, hojas y flores que se consumen como infusión. Nosotros queremos saber dónde está la mayor concentración de leptocarpina, ya que no existe esa respuesta", explicó. Por ello desarrollarán una técnica de detección rápida de leptocarpina para determinar sus contenidos en los distintos órganos de la planta y su variación a lo largo del año. De esta manera se puede conocer cuáles son las épocas más óptimas de cosecha. "El tercer objetivo tiene que ver con la respuesta productiva de la especie a las distintas técnicas de cultivo y manejo, lo que se realizará para aumentar la producción. Mientras que el cuarto está relacionado con difundir y transferir tecnológicamente los resultados, para que tengan un impacto real en el medio. En la medida de que la gente se ha enterado del proyecto nos han ido llamando, incluso de otras regiones. Ellos también quieren aprender", aseguró. El proyecto se debe desarrollar en cuatro años.
Beneficio
Esteban Fernández, Ceo de Agrícola Los Esteros, destacó que en estos momentos se encuentran comercializando el palo negro procesado, con estándares alimenticios internacionales, lo que permite que pueda ser consumido por personas en tratamientos de cáncer o diabetes avanzada. Han logrado comercializarlo en farmacias a nivel nacional y en tiendas especializadas. "El paso que estamos dando ahora es de exportar, para ello necesitamos asegurar volumen y calidad. Este proyecto nos va a permitir asegurar el volumen que necesitamos para los contratos", dijo.
"Las actuales plantaciones fueron hechas adaptando lo que se hace con otras plantas. Los rendimientos no son los esperados"
Felipe Leiva, Director Cefor Uach
Diversificar la industria regional
Este proyecto es desarrollado gracias al apoyo de la Fundación para la Innovación Agraria. El director ejecutivo de FIA, Álvaro Eyzaguirre, indicó: "Estamos entusiasmados porque la iniciativa busca propagar genotipos aptos para el cultivo comercial, permitiendo diversificar las materias primas a la industria regional. Sobre todo por su prospección a otros mercados que podrán evidenciar la producción sostenible de este arbusto nativo del sur de Chile".
4 años dura la ejecución de este proyecto, que comenzó a ser desarrollado en diciembre de 2019.