Cambio climático y covid-19
Hace pocas semanas, 155 de las principales compañías globales firmamos una declaración instando a los gobiernos de todo el mundo a alinear sus esfuerzos de recuperación y ayuda económica del Covid-19 con el cambio climático. Las organizaciones reunidas en torno a la iniciativa Science Based Targets (SBTi), pedimos políticas que construyan resiliencia frente a futuras crisis, uniendo fuerzas para limitar el aumento de la temperatura del planeta a 1,5 °C sobre los niveles preindustriales, en línea con el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050.
Esta declaración de recuperación sostenible es un llamado de acción a las autoridades, para que, efectivamente, los paquetes de estímulo económico estén alineados al Acuerdo de París, pero también es una postura contundente ante la crisis que atraviesa nuestro planeta: las empresas reafirman que sus propias decisiones y acciones están fundamentadas en la ciencia y, a su vez, piden priorizar una transición más rápida y justa de una economía gris a una verde.
¿Tiene otras implicancias firmar este documento? Sí. Aquellas compañías que reciban ayuda financiera pública debido al complejo escenario actual, están obligadas a realizar al menos tres acciones: evaluación de los riesgos climáticos en sus inversiones y estrategia corporativa; alineación al Grupo de Trabajo sobre Divulgaciones Financieras Relacionadas con el Clima (TCFD) de la Junta de Estabilidad Financiera (FSB, por sus siglas en inglés); e invertir en soluciones bajas en carbono.
Cuando adoptas la sustentabilidad como un pilar estratégico del negocio -lo que incluye adherir a esfuerzos conjuntos como este-, sabes que estás influyendo en tu cadena de valor y en los compromisos que deberás asumir en este ámbito. Se trata de un efecto cascada de influencia, o dicho de otra manera, aunque no podamos cambiar el sentido de las acciones de un gobierno, es posible influenciar para que tome decisiones alineadas a políticas sustentables.
Murilo Brotherhood Presidente de Henkel Chile
Pensar diferente
"Deja que los demás den una opinión, pero jamás renuncies a la tuya", una reflexión que hoy cobra más sentido que nunca, ya que, en el último tiempo, lamentablemente, vemos cómo la opinión distinta, la opinión divergente, la opinión mayoritaria o minoritaria, se ha transformado en una afrenta para quienes no la comparten.
Solo observando los medios de comunicación o participando en las RR.SS., vale para ser testigos de cómo el lenguaje violento y beligerante se tomó la opinión de las personas y la agenda pública.
Ya sea en lo que opinemos respecto a la historia de Chile, la nueva constitución o el manejo de la pandemia, lo cierto es que no podemos permitir que exista violencia entre las partes porque simplemente discrepen entre sí. Las opiniones siempre se deben respetar y esa diferencia es también nuestra riqueza.
No cabe duda que hoy estamos viviendo en una sociedad polarizada y donde la crisis de las instituciones, el estallido social, el reclamo por los abusos, la pandemia y la grave situación económica, solo han profundizado las desconfianzas en la ciudadanía y la beligerancia en el lenguaje. Sin embargo, emerge una oportunidad única para repensar nuestro país, hacer una pausa, reflexionar, saber escuchar, conversar, debatir y generar un diálogo respetuoso con nuestras legítimas diferencias.
Margarita Ducci Dir. Ej.Pacto Global Chile, ONU
Importancia del 5G
En un período absolutamente anormal como el actual, he sido testigo de cómo las comunicaciones se convierten en el nuevo eje educativo; de cómo el paso de una sociedad de la información hacia una sociedad del conocimiento, ha cambiado la forma de ver y ha puesto sus ojos en el crear, transferir y aplicar conocimiento, para producir un bien en la sociedad, tal y como queda de manifiesto en sendos discursos que la Unesco ha difundido por más de veinte años.
Este análisis me permite visualizar un aletargamiento en nuestro país, respecto de las medidas que impulsan beneficios directos en las políticas públicas, a través de las telecomunicaciones. Chile se ha jactado por años de innovaciones en conectividad y cobertura, pero en la práctica vemos que estamos en falta, ante lo que surgen preguntas como ¿de qué depende que la agenda legislativa proponga con más fuerza los proyectos de innovación en conectividad?, ¿por qué tenemos que esperar un semestre o un año para que las tecnologías, que ya están en operación en el viejo continente lleguen a nuestro país?
La apertura a 5G recientemente anunciada, es una innovación tecnológica que se convierte en una oportunidad para avanzar y propiciar la disminución de la brecha de conectividad que hoy nos separa.
Lo que se viene va más allá de enfrentar una pandemia, donde hemos suplido nuestro contacto físico por una video llamada, pues tiene que ver con el desafío de ser un país digital de verdad, donde todas y todos tengan más oportunidades y donde las leyes incentiven que la conectividad avance a la velocidad que se requiere.
Miguel Sanhueza Utemvirtual