Diversidad
Recuerdo que en el colegio hicimos alguna vez un collage. Recortábamos diarios viejos y pegábamos esos recortes sin ninguna regla que nos orientara.
El collage fue creado por artistas de comienzo del siglo XX y es una ruptura con pintores como Cezanne o Manet que pintan una vida plácida y feliz de aquel tiempo. Esos artistas, en sus obras, expresaban el fracaso del proyecto de la modernidad: la racionalidad, la ciencia, el marxismo y capitalismo, se rompían en mil pedazos y solo se unían pegándolos sin conexión, como los collage que hacíamos en el colegio.
Hoy emergen al espacio político, diversos relatos: pueblos originarios, mujeres, diversidades sexuales, ecologismo, jóvenes, etc, que fueron ensombrecidos por estas monumentales doctrinas políticas y filosóficas. Esta nueva realidad social pone sobre la mesa muchas voces que tienen como imperativo categórico respetar y escuchar al otro.
Ninguno de estos relatos debe tener como aspiración imponer su perspectiva sobre las demás. Nuevamente la tolerancia es un valor fundamental.
Héctor Daniel Gerter hector.gerter@gmail.com
Diabetes tipo 2
Según la última Encuesta Nacional de Salud del 2016-2017, existen alrededor de 2 millones de personas con diabetes en Chile. De los pacientes controlados, el 80% se atiende en el sistema de salud público donde no contamos con las nuevas terapias y su costo en farmacias privadas oscila entre los $40.000 y $150.000 pesos al mes, lo que impide el acceso a estos fármacos para la mayoría de las personas.
La canasta GES actual es muy limitada en fármacos seguros y eficaces, que ya han demostrado ampliamente sus beneficios cardiovasculares, lo que permitiría lograr las metas terapéuticas, disminuir los riesgos de complicaciones agudas, crónicas y muerte por diabetes.
Recomendamos que se incorporen medicamentos tales como los inhibidores de recaptación de glucosa tubular (SGLT2), los agonistas de GLP1 y los inhibidores de DPP-4. Además, incluir dispositivos de medición de glucosa en aquellos pacientes que los requieran y que cuenten con acceso a plataformas de seguimiento a distancia que faciliten el control.
La canasta GES para DM 2 debe ser actualizada con urgencia. Tenemos que empezar a ver el tratamiento de enfermedades crónicas como algo preventivo más que reactivo. Trabajar a corto plazo no tiene sentido considerando las altas tasas de mal nutrición que afectan en el país.
Cecilia Vargas Presidenta de la Sociedad Chilena de Diabetología (Sochidiab)
Escasez Hídrica
Garantizar agua para la vida de los seres humanos y las especies en la tierra, asequible, libre de contaminación y gestionada de forma eficiente y sostenible, es uno de los puntos claves de la Agenda 2030, el ODS6, dentro de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible adoptados por Naciones Unidas. Hoy frente a la grave crisis sanitaria a nivel planetario, el agua se torna, ahora más que nunca, imprescindible para el combate al COVID19 y por supuesto la vida de las personas.
Estamos viviendo no solo la propagación exponencial de una enfermedad que azota al mundo, sino también, grandes impactos de los efectos del cambio climático, y ya se ven manifestaciones tan graves como la modificación del ciclo del agua en muchos lugares del planeta, fuerte variación en el régimen de precipitaciones, cambios en la evaporación y la temperatura del agua, con graves consecuencias para los ecosistemas, la biodiversidad, la salud y la subsistencia de cientos de millones de personas que necesitamos vivir de una forma u otra, en estrecha relación y dependencia del agua.
El mundo debe reconocer cada vez más la importancia de la biodiversidad de los ecosistemas como garantía de un futuro próspero que proporcione el necesario alimento, agua y energía, suficientes para la actual población mundial de 7.700 millones de personas, que se prevé aumentará a 10.000 millones en 2050 y a 11.200 millones en 2100. No cabe duda, que la relación de la humanidad con la naturaleza y con el planeta ha cambiado profundamente y que vivimos en una época marcada por grandes transformaciones generadas por la acción humana, cuyos impactos son visibles y patentes en una misma generación y tendrán consecuencias imprevisibles. Por ello, debemos cuidar hasta la última gota de agua.
Hoy la agricultura ocupa un tercio de la superficie de tierra del planeta y es responsable del 69% de las extracciones de agua dulce. Aun así, producimos de manera inadecuada, comemos mal, y a pesar del costo de los alimentos, una parte de estos acaban en la basura. El uso intensivo de agua para la agricultura y la construcción a gran escala, de obras de infraestructura, están transformando y fragmentando los ríos, lo que, a su vez, provoca la desaparición de la biodiversidad y la degradación profunda de los ecosistemas de agua dulce, vitales para nuestra economía y para nuestro bienestar. El enorme desafío consiste en dar prioridad a la búsqueda de soluciones alternativas reales y al alcance de todos.
Margarita Ducci Directora Ejecutiva Pacto Global Chile, ONU