Escuchemos a los escolares
El término "Infancia" tiene su origen etimológico en el latín "infans", que quiere decir "quien no sabe hablar". Curiosamente en nuestra sociedad hemos extendido el concepto en la práctica a "quien no merece ser escuchado", tendemos a no consultar la opinión de nuestros niños, niñas y adolescentes (NNA). Y cuando lo hacemos casi siempre nos sorprendemos y vemos luces y orientaciones donde antes no teníamos. Tal es el caso del resultado de la consulta realizada por la Agencia de Calidad de la Educación sobre la visión de NNA acerca de la enseñanza remota y en el aula, y su impacto en el plano socioemocional.
La opinión de los 1.400.000 estudiantes que fueron consultados es clara: un 79% se siente más motivado por aprender cuando están presencialmente en el colegio, y solo un 47% se motiva a abordar las tareas cuando está en formato a distancia. Esta visión de nuestros y nuestras NNA es consistente con la visión experta internacional.
Vivimos hoy un escenario de vuelta a clases presenciales progresivo, pero no podemos pensar que no enfrentaremos a futuros nuevos desafíos que dificulten el aprendizaje. ¿Qué hacer entonces? Es necesario implementar programas de desarrollo socioemocional desde la primera infancia, programas ya probados y con resultados efectivos como el programa I Can Problem Solve, que la Fundación San Carlos de Maipo, creada por la Sociedad del Canal de Maipo, lleva implementando desde el año 2017, u otros que ponen un acento explícito en cómo ayudar a los NNA a incorporar la dimensión afectiva al servicio de su desarrollo y no quedar a merced de ésta.
Raúl Perry Fundación San Carlos de Maipo
O'Higgins y Magallanes
No hay duda que Bernardo O'Higgins conoció Magallanes y lo hizo durante su regreso a Chile desde Europa, junto a su primo Thomas O'Higgins Welch, con quien zarpó desde Cádiz el 14 de abril de 1802 en la fragata española Aurora.
Cuando su buque dobló el extremo sur de América para enfilar por el Estrecho de Magallanes próximo a Tierra del Fuego, enfrentó una gran tempestad que desató toda su furia contenida sobre la Aurora.
El buque, que al parecer tenía grandes condiciones marineras, logró sobrevivir a la tempestad, pero con serias averías en su velamen, entre ellas, la desaparición de su palo mayor, lo que le impedía continuar viaje mientras no fuera reparado.
La obligada permanencia en la zona implicó 57 días de tranquilidad en las riberas del estrecho, tiempo más que suficiente para conocer sus características físicas y su clima.
Es por tanto evidente que cuando Bernardo, ya convertido en Director Supremo, o luego ya anciano en su ostracismo, estructuró una detallada planificación relacionada con la navegación a vapor por la zona y su colonización, sabía de qué estaba hablando.
No hay duda entonces, que Bernardo sí conoció la Patagonia y entendió producto de ello, pasados los años, la inmensa importancia que tenía.
Antonio Yakcich Furche Instituto O'Higginiano de Rancagua
Primavera
Llega la primavera y con ella los estornudos. Decimos "salud" cuando alguien estornuda porque, según dice la historia, fue durante el período del Papa Gregorio I (540-604) en que se desató la peste y, como forma de lucha contra ésta, Gregorio I mandó a orar. Las personas que estornudaban gritaban "salud", lo que cumplía la función de señalar al posible infectado.
Las onomatopeyas correspondientes al estornudo son ¡achís!, ¡achú!, ¡atchú!, ¡achiú! donde la primera sílaba corresponde a la aspiración lenta de aire, y la última a la fuerte expulsión por la boca.
Si alguien trata de contener un estornudo, se puede romper un vaso sanguíneo en la cabeza o en el cuello y morir; si estornuda muy fuerte puede llegar a fracturarse una costilla, según han dicho especialistas en la materia.
Es imposible estornudar con los ojos abiertos (no lo intente) porque cuando el aire va desde los pulmones hasta la nariz puede aumentar la presión ocular y desplazar un poco los ojos, haciéndoles daño. ¡Sabiduría del cuerpo humano!
Mauricio Pilleux Dresdner mpilleuxpd@gmail.com
Avenida España
El desarrollo y crecimiento es notorio y concreto de Valdivia a través de su entorno e ingreso vial norte. Sin embargo existe por décadas un lunar ubicado en avenida España, en Las Ánimas: su calle asimétrica sin veredas y con eventos de cuidado para el numeroso tránsito que a diario se observa.
También las arboledas añosas son un riesgo, dado que es posible que producto de fuertes vientos o estado de vida de estos árboles, sufran caídas de sus ganchos que podrían causar un accidente. Sería entonces prudente y necesario que las autoridades y comunidad se organicen para prevenir, antes que ocurra un hecho para lamentar.
Boris Segovia Bruzzone segoviabruzzone@gmsil.com