Término de estado de excepción
Los cambios anunciados implican fin del toque de queda, pero también una posible baja en recursos adicionales para Salud. De acuerdo a las estadísticas del puesto de mando de la jefatura de la defensa en Los Ríos, durante el estado de excepción hubo 2.704.465 controles de normas sanitarias.
Desde este jueves y luego de 507 días de aplicación, termina el estado de excepción constitucional. Eso implica el levantamiento del toque de queda, que en Los Ríos regía entre la medianoche y las 5 AM, todos los días.
Esta medida de restricción de movilidad en las noches buscaba desincentivar la realización de reuniones sociales y fue cuestionado por muchos sectores que veían en él un control excesivo por parte de la autoridad; además de no conocerse su utilidad práctica en la disminución de contagios, ni que las personas fiscalizadas recibieran efectivamente sanciones.
A nivel nacional, los efectivos de las Fuerzas Armadas efectuaron 160 millones de controles en estos meses y hubo 509.438 detenidos por infringir las normas vigentes. De ellas, casi 200 mil fueron por circular en horarios prohibidos. En la región y de acuerdo a estadísticas del puesto de mando de la jefatura de la defensa en Los Ríos, fueron 2.704.465 los controles.
Al respecto, es importante recordar que la fiscalización del toque de queda es obligatoria; pero la desobediencia a la norma no constituye un delito, sino una falta que genera sumarios sanitarios.
En la región se calcula un registro cercano a los 4 mil infractores en esa condición. Además, en su reciente cuenta pública, el Defensor Regional Luis Soto, indicó que ese tema se reflejó en el trabajo del servicio: en 2020 ingresaron para la tramitación 9.620 causas, lo que significó un aumento del 1,6 % en relación a 2019; "ese incremento se podría atribuir a las causas relacionadas con la pandemia, cifra que fue un 22% del total de ingresos", informó.
Más allá de las cifras, hay otros aspectos a considerar. Los trabajadores del comercio, por ejemplo, han solicitado que se mantengan los horarios de cierres más temprano; mientras que los gremios médicos temen que se genere falsa sensación de seguridad.
Por otra parte, también están las implicancias económicas. Con el fin del estado de excepción se recortarán fondos asignados de manera especial a la Salud; también, los beneficios sociales como el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) no podrían llegar hasta diciembre. Hay pros y contras de este avance y, como ha pasado siempre a lo largo de la pandemia, es la responsabilidad individual y colectiva la que hará las diferencias. Libertad implica responsabilidad. Siempre.