Por la libertad
Hace meses vengo escribiendo en éste y otros medios con el objeto de facilitar nuestro discernimiento colectivo.
Debo reiterar que las Constituciones existen para controlar al Poder y proteger a las personas y sus derechos. El texto que nos propone la Convención no lo logra, ni se acerca a lograrlo. Existen numerosas razones para Rechazarlo.
No se trata de un proyecto de nueva Constitución sino que de un conjunto de promesas incoherentes y contradictorias, lleno de ensoñaciones y recetas anacrónicas. Además, se aparta de nuestra tradición constitucional. De aprobarse, sólo generará inestabilidad jurídica y política. La vida de todos será más difícil.
El texto propuesto está lleno de conceptos jurídicos trasplantados desde Bolivia o bien, indeterminados e indeterminables, como plurinacionalidad, interculturalidad o igualdad sustantiva. Es más, desaparecen conceptos esenciales, tales como bien común y orden público. Lo mismo ocurre con herramientas indispensables, como el Estado de Emergencia.
Concentra el ejercicio del poder del Estado en el denominado "Congreso de los Diputados y de las Diputadas", verdadero espejo de la Convención, cuyo número de miembros, además, no quedó determinado.
Contará, eso sí, con escaños reservados, por ahora, sólo para las "naciones pre-existentes". Será el fin de la democracia representativa, del sufragio igualitario y, por lo tanto de la ciudadanía.
No contempla mecanismos de contrapeso (el Senado, por ejemplo) o, de control de los excesos en que pueda incurrir una mayoría ocasional y/o eventualmente distorsionada.
Socava la independencia del Poder Judicial. Los jueces serán designados con criterio político partidista y estarán bajo el férreo control del Consejo de la Justicia, elegido bajo el mismo criterio.
Por que al amparo de una falsa promesa, la del "Estado Regional", se busca fragmentar al Estado-Nación, despreciando nuestra identidad, nuestra cultura y nuestra historia.
El trabajo de la Convención fue impertinente.
El domingo que viene deberemos tomar una decisión trascendental. Se trata de nuestra libertad. Nada más y nada menos.
Jorge Eduardo Vives Dibarrart Abogado jevivesd@gmail.com
Campaña
A una semana del plebiscito de salida, hito histórico en el transitar político de nuestro país, el Comando de Partidos Oficialistas agrupados en Apruebo por Chile Los Ríos, saludamos con entusiasmo el trabajo de miles de militantes y compatriotas quienes, de manera independiente o autoconvocada, han dejado los pies en la calle por una nueva Constitución que nos permita avanzar a una patria más justa.
La unidad y fraternidad vista en el sur del país da cuenta de que existe un objetivo superior por sobre nuestras legítimas diferencias, lo que nos ha permitido tener la certeza de que vamos por el camino correcto, y que este 4 de septiembre lograremos el triunfo del apruebo con alegría y esperanza, anhelo transversal de nuestro pueblo.
Mesa Política Apruebo Dignidad Los Ríos
Percepción
El modo como interpretamos nuestra realidad depende únicamente de la organización de la información recibida y que no captamos en su totalidad, lo que no significa que nuestras decisiones serán irracionales, ya que captamos aquello que va acorde a nuestro propio interés.
Nuestro mundo, tal y como lo vemos, no es un reflejo exacto que impacta directamente a través de nuestros sentidos hasta el cerebro, en absoluto, nuestro cerebro analiza, sintetiza, transforma e interpreta, - no es que sean engaños y que produzcan resultados negativos-, es sencillamente un modo de protegernos.
En este aspecto, pareciera entonces comprensible que el hombre al no percibir toda la información mantiene ciertos grados de desconocimientos en ciertos temas.
Todo esto nos ofrece la interesante reflexión de que nuestra percepción de las cosas no siempre es tal y como pensamos, por lo que percibir es también interpretar y así lo subrayan las leyes gestálticas sobre la importancia de como organizamos la información sensorial e incluyen las reglas de continuidad, proximidad, semejanza, cierre y relación de figura y fondo. En nuestra capacidad de interpretar la percepción, de interpretar la información que en cada minuto nos invade y que no somos capaces de recibir en su totalidad, nos abre la pregunta ¿Nos hacen creen en un mundo que en realidad sólo es un invento de nuestra interpretación y que afecta nuestra toma de decisiones?
Felipe Hernández fe.hernandez@uc.cl
No más felicitaciones
¿Qué diría si surgiera una propuesta para que en los campeonatos deportivos no se felicitara más a los ganadores, para no estigmatizar a los que no logran alcanzar las copas?
Eso es lo que veo cuando dicen que no felicitarán a los puntajes nacionales de la Prueba de Acceso a la Educación Superior. Nivelar para abajo.
Luis Enrique Soler Milla lsolermilla@yahoo.es