Cada año nacen en Chile más de 300 niños y niñas con fisura labio palatina, una malformación congénita que afecta labios, paladar y muchas veces el sistema auditivo, la voz y la deglución. Su diagnóstico y tratamiento son complejos. Comienzan incluso antes del nacimiento -la malformación puede detectarse ya en el segundo trimestre de embarazo- y se extiende hasta la adolescencia o más allá si es necesario, demandando esfuerzo familiar y apoyo médico multidisciplinario.

Actualmente se cuenta con coberturas especiales en el GES para esta condición y con redes de especialistas a nivel nacional cada vez más capacitadas, herederas de esfuerzos realizados desde mediados del siglo XX en esta materia por diversas instituciones y personas. Entre ellas, Rotary Internacional, que efectuaba operativos quirúrgicos intensivos (Rotaplast) los cuales permitieron visibilizar las situaciones, aunque sin opciones de dar continuidad a los servicios.

Quien sí desarrolló una labor de largo plazo fue el médico unionino Alfredo Gantz Mann (el Cesfam de la capital de la Provincia del Ranco lleva su nombre) que creó en 1962 el primer Centro de Fisurados, convertido hoy en el Hospital del Niño con Fisura, sostenido por la Fundación Gantz.

En estos días, esa institución apoya la campaña "Sonrisas que cambian vidas" junto a la ONG Smile Train, para atender a personas con labio fisurado que, por diferentes razones, no completaron sus tratamientos. La convocatoria está abierta a pacientes de todas las edades, quienes pueden solicitar evaluación a través de la web www.smiletrain.org.

En una entrevista con www.soyvaldivia.cl la doctora Carmen Gloria Morovic, cirujana plástica de Fundación Gantz y del Hospital Calvo Mackenna, explicó que se trata de una iniciativa internacional, para mejorar la calidad de vida de niños y adultos que no han logrado someterse a intervenciones para cerrar la fisura o completar seguimiento integral para superarla.

La invitación también es a toda la comunidad a conocer la labor que se realiza y que suma esfuerzos privados y públicos, para otorgar cobertura nacional a través de los hospitales de la red asistencial. En el caso de Los Ríos, las derivaciones se efectúan al Hospital de Temuco, pero en cada centro de salud se puede requerir la información necesaria.

Para algunas personas, la labor del Tecnólogo Médico es poco conocida , pero lo cierto es que seguro han visto un profesional vestido de burdeos en un hospital o clínica realizando un examen de sangre, radiológico u oftalmológico, entre otros.

Somos los encargados de contribuir al diagnóstico y/o control de patologías, además de desempeñarnos en otros ámbitos como control de calidad en industria, docencia, gestión; participamos y desarrollamos proyectos de investigación según el método científico que impacte a la comunidad, considerando principios bioéticos y de bioseguridad.

Cada 2 de octubre celebramos el Día del Tecnólogo Médico y, con orgullo, podemos decir que en la contingencia sanitaria que aun vivimos se hace vital el aporte de nuestros colegas, ya sea por su invaluable contribución en el ámbito asistencial, desarrollando un trabajo incesante de mucha entrega, liderando la batalla contra el SARS CoV- 2, especialmente en su detección temprana y el apoyo en la realización de tratamientos oportunos, lo que denota nuestra esencia y el sentido profundo de nuestra vocación ; en la docencia o en la investigación que arduamente lucha contra el tiempo para encontrar soluciones a la pandemia que enfrentamos.

La Universidad Austral de Chile lleva 62 años formando tecnólogos y tecnólogas médicos en este país, con una impronta característica.

Hoy más que nunca queda en evidencia el rol fundamental del Tecnólogo Médico para la salud de un país, su profesionalismo, su acuciosidad, su preparación y conocimiento de su trabajo, son garantía de resultados confiables que permiten tomar decisiones en momentos críticos.

Por ahora los esfuerzos de los tecnólogos siguen estando orientados, cada uno desde sus respectivos lugares de trabajo, en entregar lo mejor de sí para contribuir a recuperar la salud para nuestro país.

Vaya también un saludo a nuestros actuales estudiantes y futuros profesionales de la Tecnología Médica, ya que en los años venideros ellos serán los encargados de continuar contribuyendo a la salud del país.

Dra. María Isabel Jaramillo