Navidad
No soy cristiano y no profeso religión alguna. Mi salud me ha llevado a ver televisión más de lo acostumbrado las últimas semanas. Programas de todo tipo con los acostumbrados avisos de Navidad: árboles de "pascua" bellamente adornados con luces, brillantes esferas, cintas doradas y toda clase de adornos y "chiches", coronados por una magnifica representación de una estrella; viejos pascueros de toda laya repitiendo invariable y majaderamente su ho, ho, ho; enanos, renos, duendes, gente feliz, muy muy feliz; regalos, muchos, muchos regalos, pero… ni en el más humilde rincón, un pequeño pesebre, que exprese -mediante tan bello símbolo- que celebramos Navidad, que significa Natividad, nacimiento.
Habrá que recordar entonces que celebramos el nacimiento de un carpintero judío que nos dijo "amaos los unos a los otros", "ama a tu prójimo como a ti mismo". Quien dijo: "Antes pasará un camello por el ojo de una aguja, que un rico las puertas del cielo". Que nos instó a darlo todo: "Si alguien te pide la túnica, dale también el manto". Que expulsó, látigo en mano, a los mercaderes del templo.
Ante la realidad de las hordas de zombis consumiendo y consumiendo, propongo sincerar toda la fiesta y celebrar y desear larga vida y prosperidad al Único, Grandioso y Todopoderoso Dios del Consumo y dejar que los verdaderos cristianos y aquellos que -como yo- admiran la figura del también llamado Maestro, nos juntemos en una cena familiar, ojalá con esos familiares o no con quienes guardamos rencores, para celebrar con genuina alegría -sin hohohoes, por favor- la verdadera Navidad.
Dr. Roberto Matamalaelorz matamalelorz@gmail.com
Desmunicipalizar
He leído en el Diario Austral de hoy el reportaje en el cual el alcalde de Zapallar, Dn. Gustavo Alessandri, se refiere a la desmunicipalización de los colegios públicos y la creación de los Sistemas Locales de Educación Pública (SLEP) cuyo calendario de aplicación fue aplazado recientemente por el Mineduc.
Al respecto debo recordar que en febrero del presente año escribí un documento en el cual expresé mi preocupación por la destrucción de un proceso iniciado en el año 1986 con el fin de descentralizar la administración educacional traspasándola a las comunas en las comunas de ubicación de los colegios.
En el año 2017, y tras 31 años durante los cuales las Municipalidades fueron adquiriendo experiencia en la administración educacional, se dictó la Ley 21040 con el fin de dejar sin efecto la municipalización estableciendo la creación de 70 Sistemas Locales de Educación Pública, reemplazantes de los DAEM.
La dictación de la citada ley, sin participación de los principales actores del sistema educacional, me permitió plantear la duda acerca de la conveniencia de terminar con un sistema que funciona razonablemente bien y que es susceptible de ser mejorado.
Omar M. Henríquez F. omanuelito75@gmail.com
Fin de año con cifras negativas
Llegamos a fin de año y con ello, conocimos las últimas cifras macroeconómicas de este 2022. El saldo, desde ya, no es positivo: tenemos una inflación que sigue al alza -13,3% en doce meses-, un Banco Central que mantuvo alta la tasa de interés (11,25% Tasa de Política Monetaria) y una UF que terminará diciembre sobre los $35.000.
Los números que observamos coinciden con el diagnóstico de algunos expertos, aunque para otros son una sorpresa. Como sea, y pese a las predicciones, en la práctica ha significado que hemos vivido un año difícil de forma transversal. Si bien los efectos impactan en distintas medidas, esta crisis económica ha golpeado a personas, pymes y grandes empresas.
Partimos el 2022 sin el estado de excepción que nos acompañó el 2020 y el 2021, con el retorno de los juicios de cobranza y la incipiente alza en la cantidad de deudores morosos que había bajado durante la pandemia. El panorama no se puso mejor. Con los meses llegó la guerra entre Rusia y Ucrania y otros factores externos e internos que tensionaron nuestro mercado. Como si fuera poco, con la quiebra de grandes constructoras, que se produjo con mayor fuerza este segundo semestre, se prevé un efecto en cadena. Este podría hacernos comenzar un 2023 con la insolvencia de pequeños comerciantes y de una parte significativa del mundo del subcontrato. Trayendo consigo un alza sostenida e importante en el desempleo, que ya se encuentra en un 8%.
Estos antecedentes nos deben mantener alerta. Como abogados que buscamos soluciones legales para problemas de endeudamiento, hemos visto con pesar cómo las personas y las pymes han tenido que perder sus bienes porque sus deudas superaron ampliamente sus ingresos.
Lo preocupante hoy no es terminar el año así, sino comenzar un 2023 proyectando un escenario de recesión o estancamiento económico inevitable. Por eso, se hace urgente e importante que, en un contexto como este, reflexionemos y llevemos la conversación hacia un plan económico responsable, que nos permita hacer una planificación consciente y prudente sobre nuestros próximos gastos de cara al 2023.
Ricardo Ibáñez Socio fundador defensadeudores.cl