En octubre del 2021 constituimos la Mesa de la Ruta 5, instancia de trabajo público - privada, que nos permitió consensuar voces y opiniones frente a la nueva concesión de nuestra principal ruta de conectividad, contrato que tendrá una duración de 25 años y donde se abre un espacio de negociación importante para futuras mejoras.
Esta visión común, inclusiva, participativa y ciudadana logró tener la legitimidad para avanzar en acuerdos, sin embargo, nuevamente estamos sufriendo la presión del centralismo, con decisiones que nos tienen inquietos a toda la comunidad regional. Esta situación debe preocuparnos, especialmente por los ingresos norte y sur a nuestra capital regional.
En nuestra última agenda de trabajo en la Región Metropolitana, manifestamos a la Ministra de Obras Públicas, Jéssica López y al director general de Concesiones, Juan Manuel Sánchez, la necesidad urgente de que esa mesa de trabajo siga siendo el vehículo para establecer los acuerdos con la región, permitiendo buscar los consensos e intereses del territorio, pero particularmente buscando los beneficios para nuestras comunidades y familias aledañas, con el objeto de tener un trato de buen vecino y superar la imposición de los '90.
En los próximos días vamos a trabajar con las comunidades, alcaldes, concejos municipales y nuestros profesionales, con el objeto de recoger las preocupaciones que hoy día están presentes frente a la propuesta del nivel central. Queremos que se tomen las mejores decisiones, entendiendo que se viene un cambio radical con la eliminación de los peajes troncales en Imulfudi y Choroico, que es una gran noticia y, la habilitación de pórticos con tag, que llevarán más equidad al territorio en la medida que no afecte directamente la vida de comunidades en sus circuitos sociales y productivos.
Estamos en un proceso de negociación, donde los aspectos técnicos lógicamente tendrán que respetarse, pero donde también esperamos que la ubicación de los pórticos sea el adecuado, causando el menor daño posible y sin castigo a las localidades, sobre eso hay que buscar una solución con el nivel central. Necesitamos levantar acuerdos. Necesitamos plantear nuestra mirada y tener la capacidad como región de relacionarnos con las autoridades y comunidades que se sienten afectadas con esta propuesta, pero por sobre todo necesitamos buscar una solución que nos permita causar el menor daño posible a la región y sus familias. ¡Esa es nuestra convicción!