Ante la trabada discusión respecto al futuro de las Isapres y cómo ejecutar el fallo de la Corte Suprema, resulta fundamental llegar a un consenso que tenga al centro del debate a la ciudadanía, y en particular a los afiliados.

Somos testigos de las exorbitantes ganancias que han llegado a concentrar las Isapres, y es imposible ignorar las diferencias de cobros excesivos que ascienden a un billón de pesos, correspondientes a 725 mil afectados. Resulta desalentadora e incluso cruel la estrategia comunicacional a la que apelan las Isapres, en orden a indicar que la mantención del sistema dependería de la mantención en los cobros de los propios afiliados. Se desconoce y obvia el hecho de que es la propia estructura y diseño de estos organismos la que ha cimentado sus ganancias, a partir de cobros excesivos, de manera aún más vejatoria a mujeres y personas con algún tipo de enfermedad particular.

Es irrisorio y contraproducente: Las instituciones de salud previsional de nuestro país, quienes se encargan de financiar la atención y beneficios de salud para la ciudadanía, sanciona y construye su imperio con quienes debería proteger. Y solo hoy, cuando ven amenazada su existencia y funcionamiento, apelan a la compasión ciudadana.

Es difícil creer que nunca se hayan percatado de la forma de funcionamiento que por años han sostenido y defendido. Cuando el presidente de la Asociación de Isapres declara qué "si se aprueba este proyecto, en septiembre estaría cerrado el sistema", parece broma. ¿La única forma de que funcionen es a costa de los cobros excesivos a sus afiliados? Sus declaraciones calan profundo cuando la realidad es que en Chile se hacen enormes esfuerzos para costear tratamientos y atenciones médicas, y se recurre a bingos y completadas para conseguir fondos para los tratamientos médicos.

Desde el gobierno se está impulsando una ley corta que tiene por objetivo modernizar Fonasa a través de la creación de una Modalidad de Cobertura Complementaria, que regula las Isapres mediante una notificación a la normativa que regula a las instituciones de salud privada, y que establece una devolución monetaria a los afiliados afectados por los cobros excesivos.

Esta propuesta que debe ser sometida a discusión para lograr un apoyo transversal.

Esperamos que la discusión se destrabe y se logre un consenso legislativo que permita que las Isapres respondan de forma concreta ante la ciudadanía, devolviendo a sus afiliados lo que permitió construir sus millonarias ganancias. Los servicios deben ser responsables con las personas, no solo cuantificarlos.

Con la presencia del ministro de Vivienda general Roberto Guillard Marinot, fue inaugurado ayer en Valdivia el conjunto habitacional "Petrohué" ampliación, compuesto por 50 viviendas para familias valdivianas.

Se inicia campaña por IRA

La implementación de una sala para Infecciones Respiratorias Agudas (IRA) en el consultorio de Lago Ranco, además de una unidad en San José de la Mariquina, son algunas de las acciones adoptadas por el sector salud en el inicio de la campaña de invierno frente a las IRA.

Apoyo a pacientes postrados

Un éxito fue la campaña para ayudar a pacientes postrados de Paillaco. Lograron reunir $13 millones, superando con creces los $2 millones reunidos el año pasado. La campaña fue organizada por el Centro de Salud Municipal y Rotary Club.

Las estafas telefónicas y los denominado "Cuento del tío" se han hecho cada vez más frecuentes y afectan sin distinción. Hay familias que aseguran haber recibido llamados donde les indican que tienen secuestrado a uno de los hijos y exigen un rescate, que algún integrante del grupo ha sufrido un accidente y hay que pagar una fianza, o que el dueño de casa envió a alguien a retirar artículos de valor.

La delincuencia es cada vez más sofisticada y usa metodologías osadas. Las bandas operan incluso desde las cárceles y pese a que el reglamento penitenciario lo prohíbe, los celulares son frecuentes, pues son llevados desarmados por los familiares, hasta que los reclusos rearman las piezas. Es un claro indicio de que la organización delictual no se extingue con la reclusión de sus integrantes y que, por el contrario, recurren a la tecnología para seguir delinquiendo, con la seguridad de que esto no aumentará su castigo.

Hoy es posible obtener a través de internet todos los datos de una persona, mientras que las redes sociales entregan mucha información. Así, los delincuentes pueden reconstruir el entorno de sus potenciales víctimas, mientras demuestran la habilidad de ir logrando más antecedentes que las mismas personas proporcionan en forma espontánea en la conversación.

Por eso, las instituciones policiales han advertido a las personas que no deben creer inmediatamente en este tipo de llamados, a tener otro teléfono para verificar dónde se encuentra el familiar y verificar si está bien, a no entregar ninguna información del domicilio, nombres, ni decir con quién están. Los delincuentes se nutren de datos que obtienen en la guía telefónica o de internet, sobre todo de redes sociales, pero también de la misma información que van entregando sus víctimas.

Es evidente el grado de sofisticación que alcanzan los delincuentes en algunas acciones y los recursos de que disponen para emprenderlas. Por eso, es necesario que estos temas se conversen en familia, para establecer un protocolo de prevención, advirtiendo especialmente a los niños, que suelen ser los que proveen más información en el caso de esos llamados.