Comunidad LGBTIQA+: Los avances y pendientes de Valdivia en el Mes del Orgullo
Insistir en la habilitación de un policlínico para personas trans; y seguir velando por instancias de educación y acompañamiento son parte de una agenda de trabajo permanente. Activistas, autoridades y artistas analizan cómo, desde sus respectivas áreas, están aportando a disminuir las brechas.
Hace 55 años, un 28 de junio, hubo manifestaciones sociales en Estados Unidos en contra del accionar homofóbico de la policía.
La chispa que encendió la rebelión fue una redada en el Stonewall Inn, bar de Nueva York donde los uniformados arremetieron contra lesbianas, gays y transexuales. Aquel día, las minorías se cansaron de la opresión y alzaron la voz en un hito que se terminó transformando en fundacional del denominado Mes del Orgullo.
El recuerdo de esos hechos emancipatorios se volvió con el paso de los años en un instancia para reconocer públicamente los derechos de la comunidad LGBTIQA+ a nivel global. ¿Pero qué tanto se ha avanzado en la materia? y ¿Cuál es la realidad de una ciudad como Valdivia?
Amor
En junio Pascual André cumplió seis años desde que inició su transición. Acorde a su identidad de género, dejó de ser Andrea. En noviembre de 2023 se sometió a un histerectormía total y actualmente sigue con terapia hormonal. El joven valdiviano reconoce que cada día que pasa se siente más completo. Como parte del proceso escribió el libro "Somos uno. El relato de un chico transexual" y se volvió un activista en dos cosas que considera fundamentales: escuchar y aconsejar a quienes están pasando por lo mismo que pasó él.
"Eso ha sido muy satisfactorio. Hay muchas personas que han 'salido del closet' y que siempre necesitarán una fuente de ayuda, amor y energía para mostrarse tal y cuales son. Yo me siento muy feliz de aportar con un granito de arena a quienes aún no cuentan con una voz para decirle al mundo aquí estoy y este soy yo", dice.
Aunque André siente que Chile ha progresado en materia de igualdad de oportunidades para las minorías sexuales, aclara que todavía falta por materializarse cosas esenciales. Por eso, en el Mes del Orgullo LGBTIQA+ celebra que la comunidad nunca haya sido silenciada.
"Celebro que tenemos una comunidad súper luchadora, que a pesar de toda la discriminación, el abuso, los maltratos y todo lo malo que sabemos que ha ocurrido, se mantiene de pie. No hemos claudicado en seguir adelante por lograr todo aquello que realmente necesitamos. Me siento contento porque simplemente no se bajen los brazos. Más que solo en este mes, de manera permanente también debemos estar felices por toda la gente que nos apaña y que nos respeta. Son quienes nos dan el amor para nuestra lucha diaria", indica.
Estudio
Según el XII Informe Anual de los Derechos Humanos de la Diversidad Sexual y de Género, del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) el 2023 fue uno de los peores años para los derechos humanos de las personas LGBTIQA+. A nivel nacional aumentaron en 52,6% los casos y las