Diputado Durán renuncia a la junta de Catedral Evangélica tras diferencias con su padre
IGLESIA. Toma la decisión luego del anuncio del obispo de que se separará para casarse con su nueva pareja.
El diputado Eduardo Durán Salinas (Renovación Nacional) informó que renunció a la junta de oficiales de la Catedral Evangélica de Santiago. Su padre, el obispo Eduardo Durán Castro, enfrenta una petición de salida como líder de la entidad.
La decisión fue tomada por el legislador luego de que su progenitor, el obispo evangélico Eduardo Durán Castro, anunciara la separación de su cónyuge para casarse con su nueva pareja.
"Yo conversé muchas veces con él, tratando de hacerle ver algunas situaciones, lo que nos generó conflictos y desavenencias. Pero lo hice porque amo a mi padre. También es verdad que renuncié a la Junta Oficial de Diáconos al no existir las condiciones para salir de esta grave crisis que presenciamos, yo me quemé y algunos oficiales, pero otros callan hasta ahora y otros se desmarcan cuando el barco naufraga", escribió el parlamentario oficialista en un comunicado.
"escarnio público"
"Sí, mi padre pudo haber cometido errores que afectan la honra de la Iglesia, y que el Señor conoce, pero no merece en nada lo que vemos hoy, si hasta es tratado con total indiferencia y desprecio por sus propios hermanos", añadió Durán Salinas.
El diputado apuntó: "Por mi posición, los que lo rodean me constituyeron en su enemigo, pero lo hice porque amo a mi padre y eso es lo que se considera lealtad. Y no callando como muchos que alardean con la palabra lealtad, y callaron sin darle un buen consejo... Espero que el Señor restaure la vida de mi padre".
"Con gran dolor estoy presenciando un escarnio público sin misericordia a quien es nuestro pastor, pero al fin hombre y débil como todos nosotros", expuso el legislador.
Sobre los videos que circulan por redes sociales exigiendo la renuncia del obispo, el diputado Durán Salinas dijo que está "dolido en lo más profundo al ver videos y declaraciones en que se podrán dar motivos razonables para disentir de la administración de mi obispo", pero donde "lo hacen con un total desprecio al hombre que Dios ha usado para enseñarnos y bendecirnos en este tiempo, como casi que fuera un ser despreciable".