Cruzó la meta, cumplió su objetivo y corrió en búsqueda de sus padres. Vicente Sarabia Castillo se fundió en un interminable abrazo con Julio y Karin, en quienes reconoce el mayor apoyo para el desarrollo de su novel carrera deportiva. El miércoles 9 de octubre cruzó en primer lugar los 2 mil metros de los Juegos Nacionales Escolares en la categoría Sub-14 y se transformó en el nuevo campeón chileno estudiantil.
Vicente nació el 12 de noviembre de 2005 en Valdivia y desde kinder estudia en el Colegio Martin Luther King, donde cursa Octavo Año Básico y además de representar a su establecimiento en los campeonatos escolares, a nivel federado defiende los colores del club Israel Sáez, donde forma parte de una nueva generación de mediofondistas y fondistas que se forman bajo la orientación del entrenador y ex seleccionado nacional.
El joven recuerda que cuando recién tenía nueve años de edad, Sáez lo invitaba y motivaba a correr, hasta que a los 11 tuvo la oportunidad de disputar un torneo interescolar por su colegio. Fue el comienzo, el germen de su interés por el atletismo. Empezó a entrenar de manera constante y en el verano de 2017 ganó su primera prueba: 600 metros planos en el Campeonato Ovidio Gajardo.
Desarrollo
¿Qué más recuerdas de esos comienzos?
-Primero empecé a mentalizarme con la idea de clasificar a los Juegos Nacionales Escolares de 2018 y fue un camino largo, que se me facilitó porque el colegio me apoyó de inmediato con una beca deportiva y beneficios. Clasifiqué a los juegos del año pasado y salí séptimo en los 2 mil metros, pero bajé mi marca en 7 segundos. Fue una gran experiencia. Después este año fui a un cross a Temuco y salí segundo en los 4 kilómetros.
¿Cómo fue la final de los 2 mil metros de ahora y tu victoria?
-La carrera no fue tan complicada como la vez pasada. No podía salir a correr muy fuerte desde el inicio, así que aproveché a un corredor que andaba motivado y lo seguí. Pasé quinto en las dos primeras vueltas y comencé a avanzar, aprovechando que tengo buen umbral. En la tercera vuelta pasamos adelante con un atleta de la Metropolitana, en los 200 metros antes de la última vuelta lo pasé y salí a correr con todo.
¿Qué se siente ser campeón chileno?
-Una felicidad tremenda, porque llegué al objetivo planteado hace dos años. Es una felicidad máxima también por mis papás, que se han sacrificado mucho. Su apoyo es enorme, siempre están presentes, aunque muchas veces les cuesta viajar, pero están ahí como sea. Hacen cualquier sacrificio para acompañarme.
¿Por qué elegiste las pruebas de medio fondo o fondo?
-Por mi contextura física (1.68 metros, 44 kilos) y porque tengo buena oxigenación.
¿Cuáles son tus próximos desafíos?
-El Nacional Federado de menores y cadetes en Chillán, del 1 al 3 de noviembre. Después está el Sudamericano Escolar de Paraguay en la primera semana de diciembre, para el cual estamos esperando la confirmación, porque debería ir como ganador de los 2 mil metros. Para el próximo año están los Juegos de la Araucanía.
¿Cómo es el apoyo del colegio?
-Los profesores, los inspectores, todos ayudan muchísimo. El apoyo del equipo de atletismo del colegio es fundamental, se preocupan de todo. Es una ayuda increíble. No conozco otro colegio que apoye tanto a sus deportistas.
Pensando a nivel internacional
Pese a que tiene solo 14 años de edad, Vicente Sarabia apuesta a un futuro de nivel internacional: "Quiero llegar a los Juegos Olímpico de la Juventud y los Panamericanos de 2023 en Santiago. Soy chico aún, pero uno tiene que proponerse y fijarse metas", asegura. Y más a futuro, su sueño es correr la maratón. "Tengo dos compañeros que corren, que me han contado cómo es la prueba y tengo el físico como desarrollarme en esa prueba", agrega.
"El apoyo de mis padres es enorme, siempre están presentes, aunque muchas veces les cuesta viajar...". "Quiero llegar a los Juegos Olímpicos de la Juventud y los Panamericanos de 2023 en Santiago".
Vicente Sarabia, Estudiante Colegio Martin L. King