30 años | 29 de noviembre de 1989

Declaran edificio del Liceo de Hombres como "crítico"

En categoría de establecimiento en estado crítico fue declarado el LIceo A6 de Hombres, debido al mal estado en que se encuentra su edificio. La información fue confirmada desde el Servicio de Salud, donde tras una inspección descubrieron al menos cuatro fallas asociadas a la fragilidad del terreno donde está emplazado.

20 años | 29 de noviembre de 1999

Piden investigar el destino de 2 mil millones de pesos

El Comité Pro Pavimentación de Avenida Pedro Montt pidió a la Contraloría General de la República que se investigue el destino de los $2 mil milloque había para la construcción de la mencionada arteria. La gestión fue realizada por el presidente del organismo, Carlos Opitz, quien dijo que esos fondos estaba asignados desde 1994.

10 años | 29 de noviembre de 2009

Conama certificó labor de Liceo People Help People

El liceo People Help People de Pullinque, en la comuna de Panguipulli, se transformó en el primer plantel certificado ambientalmente por Conama, desde la creación de la Región de Los Ríos. El director del plantel, Ernesto Uslar, destacó que no sólo se logró tal distinción, sino además la categoría de "excelencia" en el sistema nacional.

Cada cierto tiempo se hace necesario reiterar los llamados a la comunidad a adoptar una actitud más solidaria en lo referido a la donación de órganos para trasplantes, materia en que nuestro país presenta malos antecedentes, agravados por una creciente tendencia a ayudar cada vez menos a quienes lo necesitan.

Esto ha quedado en evidencia, una vez más, al conocerse la información que detalla que 150 personas se encuentran en la lista de espera para un trasplante renal en el Hospital Base de Valdivia, el único recinto en condiciones de satisfacer las necesidades de una intervención de este tipo entre las regiones de Los Ríos y Magallanes, es decir, en toda la amplia zona que se conoce como el sur del país.

Las cifras se completan con que en lo que va del año, en Los Ríos ha habido once operaciones y apenas dos procuramientos o donaciones, de acuerdo al lenguaje médico, proceso que se inicia con la pesquisa de un potencial donante y que finaliza cuando se les extrae el órgano que permitirá cambiar la situación del paciente a la espera.

La información entregada por especialistas del Servicio de Salud Valdivia agrega que hubo cuatro casos de ciudadanos que entre su última voluntad expresaron sus deseos de convertirse en donantes, pero como la última palabra queda en sus familiares, tras la muerte del potencial donante, solo en dos casos se pudo contar con los órganos, ya que en los dos restantes los encargados de decidir se negaron a entregar lo que su familiar habría querido aportar.

Es una situación que se arrastra por años y que obliga a pensar en la necesidad de un cambio en la legislación, para que efectivamente se respete la decisión de quien en pleno uso de su conciencia entregue lo que puede salvar una vida.

Se habla mucho de solidaridad, pero la realidad a través de estos números nos dice que sigue siendo un problema sin solución. Se entiende que no es fácil para muchas personas, por razones de diversa índole, entregar parte de un ser querido, pero con madurez se puede avanzar decisivamente.

"Cantemos las glorias del triunfo marcial que el roto chileno obtuvo en Yungay". Así lo relata Alberto Blest Gana en el libro El Loco Estero: "Al segundo verso resonó entonces la voz del mozo. Con risueño semblante y animados ojos, hizo oír, en medio del ruido general, esta variante burlesca".

El roto, esa palabra que hemos oído tan despectivamente en los últimos días, pero que, paradójicamente, posee monumentos en todas las ciudades chilenas, es un aspecto que al parecer no muchos conocen. Simbolizado en una estatua de un hombre con su pantalón arremangado, así como la camisa, fusil y una gavilla de trigo en su costado. Por ello, si el roto es digno de estatuas es que algo representa en el marco de la identidad nacional.

La primera escultura a este personaje fue inaugurada en Santiago en la Plaza Yungay en el año 1888, siendo su escultor Virginio Arias. Con el tiempo, en distintas ciudades del país, se replicaron utilizando como modelo la de Plaza Yungay, que en su base tiene algunas inscripciones como: "Chile agradecido de sus hijos por sus virtudes cívicas y guerreras".

El roto chileno, ese hombre que desde el campo se unió a las filas del ejército en el contexto de la guerra contra la Confederación Perú Boliviana (1837-1839) y que llevó a Chile a su primer triunfo militar tras las guerras de independencia. Entre las tropas comandadas por el General Manuel Bulnes, en la batalla de Yungay, estaba este hombre anónimo. El monumento es un recuerdo de aquellos que en el anonimato lucharon bajo el estandarte nacional no sólo bajo el mando de Bulnes, sino que también en otras guerras.

Así, como posee monumentos que se yerguen en distintas ciudades de Chile ha sido también inmortalizado a través de la caricatura; Juan Verdejo Larraín, de creación de Jorge Délano, era un personaje que encarnaba al roto chileno en la revista Topaze, "prototipo del roto urbano, pobre, desdentado, pero optimista, de buen humor y gran juicio político (…)", se describe en la web Memoria Chilena.

Este roto que en muchos momentos de la historia ha sido cuestionado, pero que, en otros, ha sido considerado como base de la chilenidad. De esta forma, autores de los primeros años del siglo XX comenzaron a exaltar algunos rasgos positivos del roto, como por ejemplo su fuerza física, honradez, astucia, picardía, calidez y por sobre todo, su gran apego a los símbolos nacionales: Es un patriota de tomo a lomo. El roto chileno es un protagonista anónimo y a la vez pilar de la historia de Chile.

Lorena Liewald Dessy Directora de Pedagogía de la U. San Sebastián sede Valdivia