Un total de 25 peleas, con 24 victorias y una sola derrota. Campeona amateur de Chile en 2018. Psicopedagoga y estudiante de Pedagogía en Educación Diferencial. 24 años de edad. 1,62 metros de estatura y un respetable golpe recto de derecha. Son la carta de presentación de "La Pantera": Claudia Uribe Uribe, la joven valdiviana que luego de cumplir un ciclo como peleadora amateur, prepara su debut en el boxeo profesional.

Integrante del team del club KO, trabaja junto al entrenador Alejandro Concha, la campeona latina y rankeada mundial Daniela Asenjo y el preparador físico Diego Sobarzo para estar a punto cuando llegue el momento del debut.

Nacida y criada en el barrio Beneficencia, Claudia Uribe disfruta del apoyo de sus mejores hinchas: su madre Verónica y sus abuelos Elda y Rolando. Cursó la enseñanza básica en la Escuela España, la media en el Liceo Santa María La Blanca, se tituló de psicopedagoga el 2018 en Inacap y actualmente es estudiante de Pedagogía en Educación Diferencial en la sede Valdivia de la USS. Al mismo tiempo, es funcionaria del Master College.

Mientras espera que el país supere la crisis sanitaria, su debut como profesional está proyectado para fines de año o comienzos de 2021. Será en la categoría pluma (57,200 kgs.), donde podrá mostrar la técnica aprendida durante siete años de práctica del boxeo y luego de registrar breves pasos por el kenpo karate y el kick boxing.

Primer round

¿Por qué elegiste el boxeo y no otra disciplina, considerando tu paso por otros deportes de contacto? ¿Qué es lo que te atrajo del boxeo?

-No soy buena para las patadas y me gustó más el boxeo, porque desde la forma de pararse es muy diferente. En el kenpo eran básicamente formas y en el kick boxing se usan muchas patadas. También encuentro que el boxeo es más competitivo, además que requiere de mayor preparación.

¿Cuáles son tus fortalezas y cuáles tus debilidades como boxeadora?

-Entre las fortalezas, soy constante y considero que mi mejor golpe es el recto de derecha, además me gusta lanzar jabs. Mi debilidad es cumplir con la dieta, con el peso, algo que es muy difícil para todos los boxeadores, además que los pesajes tienen que ser exactos. Y técnicamente, tengo que mejorar el uppercut.

¿El boxeo sigue siendo un deporte machista, donde incluso a la mujer que lo práctica se le tilda de poco femenina?

-Lamentablemente, aún es catalogado como un deporte de hombres, porque no hay muchas mujeres peleando y piensan que la mujer que boxea es amachada. En Chile, todavía existe el prejuicio de que una mujer no puede hacer boxeo. Además en los campeonatos se nota ese machismo. A los hombres les pagan más, tienen más becas. Por todo eso, es complicado el boxeo femenino. Y lo de la femineidad es algo subjetivo y depende de cada una.

Otra realidad

¿Por qué decidiste ir al profesionalismo? ¿Cuáles son tus objetivos ahora?

-Lo decidí porque luego de siete años entrenando, quería dar este paso. Lo tenía pensado desde hace un año, hasta que hablé con mi entrenador (Alejandro Concha) y decidimos que lo definiría este año o el próximo, cuando pase todo lo de la pandemia. Mi primer objetivo es probar cómo me va y si es lo mío, si me siento bien y cuánto puedo dar. Después, habrá que ver si puedo pelear por algún título.