Cocinas a leña de Samuel Lizama ahora se pueden ver en espacios públicos
VITRINA. Pintor local se pasó al muralismo como parte de un proyecto de hermoseamiento de fachadas del comercio local.
Con presencia en ferias, postulación a fondos concursables y realización de clases. Así estaba proyectado el 2020 en la agenda de Samuel Lizama, pero la pandemia obligó a cambiar los planes.
La suspensión de actividades presenciales lo llevó a renunciar a la alternativa de hacer clases online en marzo y abril, al no ser un formato adecuado a su estilo de trabajo. Además, tuvo que bajar en 50% el valor de sus obras y hacer una rifa para generar ingresos que le permitieran salir adelante durante la primera mitad del año.
"Cobré menos por mis obras y eso generó una reactivación de las ventas, lo que ha sido bastante positivo. Ya no hago clases, pero decidí enfocarme en otras opciones creativas como por ejemplo la escenografía para montajes de disciplinas como por ejemplo el teatro", explica.
En medio de la búsqueda de nuevas alternativas es que surgió un proyecto de hermoseamiento de fachadas de una farmacia con presencia regional. Ello le permitió volver al muralismo, tras haber puesto parte de sus iconografía en lugares públicos en el contexto del estallido social del octubre del año pasado.
Al aire libre
En vez de una obra con rasgos de publicidad, a Lizama se le ofreció la alternativa de crear piezas originales en base a su propia iconografía.
De esta forma es que en locales de calle Chacabuco y Arauco, en el centro de Valdivia,se pueden ver a todo color composiciones con cocinas a leña y un entorno propio del sur. Es esmalte sobre planchas de acero de dimensiones aproximadas de entre seis metros de alto, por cuatro de ancho.
"Si bien se trata de un trabajo por encargo, creo que es un área interesante de ser explorada por el comercio de Valdivia en general. Muralistas como los del grupo Quarzo y Samuel Torres tienen mucha experiencia en eso. Siento que se trata de abrir espacios, que la gente pueda ver obras en lugares públicos y más aún en un año donde no está la alternativa de visitar una galería. Así también podemos formar audiencias", dice Lizama.
Impulso al sector
El taller del pintor está ubicado en el sector de la Plazuela Berlín. Es en Bueras N° 1992 donde precisamente hubo una jornada de puertas abiertas hace una semana. La instancia fue asociativa y se ocupó un solo lugar para exhibir y comercializar el trabajo de distintos colectivos que trabajan en el barrio. Pese a que la cuarentena impidió repetir la experiencia, no se descarta nuevas versiones de una feria de arte.
"Podemos transformar la ciudad en una galería abierta. Estamos en un año en que debemos buscar nuevas alternativas para mostrar lo que hacemos y seguir creciendo".
Samuel Lizama, Artista