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como la gratuidad en el gobierno de Bachelet- fue haber calado profundo en la ciudadanía, en el entorno social, en quienes lo vivieron y en quienes fueron espectadores. Este proceso abrió la mentalidad de hasta donde podía llegar la medida de lo posible. Fue el primer momento en el que se cuestionó directamente el sistema neoliberal en el que estamos insertos y puso los puentes para, después de diez años, generar una revuelta social. Veo 2011 como una semillita en la que todos despertamos, que se consolidó en 2019 y que hoy está decantando en una nueva Constitución. El año 2011 me enseñó la relevancia de la organización comunitaria", expresó Jean Maureen Fuentes.
Para quien este movimiento también dejó muchas lecciones de vida fue para Camilo Pinto. En 2011 tenía 15 años y estaba en segundo medio del Liceo Armando Robles. Era el delegado de eventos del centro de alumnos y estaba descubriendo la política. Llegó a ser presidente de la Federación de Estudiantes Secundarios de Valdivia, sucediendo a Fuentes en 2012. "Vengo de una familia que vivía en la población Rubén Darío y que se había visto azotada por la represión, así que temían mucho y pensaban que la política era para los políticos. Involucrarme causó un problema en mi casa, pero era algo que instintivamente llamó mi atención", relató. Recordó que para él fue impresionante cómo de demandas como la cobertura del pase escolar, de las becas Junaeb o la eliminación de la jornada escolar completa se llegó a pedir incluso una asamblea constituyente. "En los plenos de la Cones se empezó a decir que la única forma de poder transformar el sistema era sacar la Constitución. El 2019 volví a vibrar como en 2011. Siento que aportamos un granito de arena que ahora nos permite ver un Chile muy diferente, hasta en las candidaturas presidenciales", contó.
Camilo Pinto estudió Derecho durante tres años en la Universidad Austral de Chile. Sin embargo, decidió cambiarse a Pedagogía en Historia en 2019. El año pasado fue parte de Un Techo para Chile.
"Ese período me enseñó a ratificar que nos ha tocado crecer en un país donde el adultocentrismo es imperante. Se pensaba que los jóvenes nos quejábamos de llenos, pero es satisfactorio comprender que son procesos que hay que permitir que ocurran. Quizás los jóvenes logran interpretar el mundo de manera distinta, para que sea más justo para todos", dijo.
Universitarios
Rodrigo Cósimo estudiaba Periodismo en 2011, año en el que además era vicepresidente de la Federación de Estudiantes de la Uach, Feuach. "Desde la universidad estuvimos muy involucrados en generar un movimiento social amplio, que trascendiera lo universitario y educacional. Queríamos que fuera tan amplio que formara una alianza intergeneracional en Chile e incluso en el continente. Nosotros discutíamos muchas horas en asambleas y consejos superiores y siempre buscamos mantener el movimiento fuerte para cambiar la trayectoria de lo que veníamos viviendo, de una sociedad completamente mercantilizada a una de derechos sociales, con más consciencia colectiva que le da más sentido a lo público", dijo. Y cree que las discusiones sobre esos cambios se han logrado consolidar en la gente. "Creo que hemos avanzado en eso ya no solo en la educación, también en el sistema previsional, la salud, la economía", agregó.
Para Cósimo, la generación de estudiantes de 2011 logró la gratuidad, pero se requiere avanzar aún más para democratizar el conocimiento. "No solo el acceso a estudiar y formarnos como profesionales, sino que también el rol que tiene la educación superior en la sociedad respecto a la vinculación y divulgación del conocimiento, la ciencia y la investigación. Además, aún se mantiene el endeudamiento de las familias y la falta de oportunidades", especificó.
Cósimo fue concejal del PC por Valdivia entre 2012 y 2016. Ahora cursa el Magister en Desarrollo Rural de la Uach y trabaja como periodista independiente.
2006 fue la llamada "Revolución Pingüina" en la que estudiantes secundarios del país se manifestaron por la educación. Fue un precedente para lo que pasó en 2011.
6 meses duraron las tomas en Valdivia. Terminaron el 23 de diciembre, cuando 11 establecimientos decidieron poner fin a esa manifestación en forma conjunta.
3 diputados que actualmente se encuentra en el Congreso fueron dirigentes estudiantiles: Camila Vallejo (PC), Giorgio Jackson (RD) y Gabriel Boric, Frente Amplio, precandidato presidencial.