Prevención de los incendios forestales
Sequía, verano con altas temperaturas, descuido de las personas, son factores de riesgo a considerar en Los Ríos. Solamente el 0,1% de los siniestros se produce por causas naturales. En todos los demás hay intervención humana. Se debe tomar conciencia sobre esto.
Las imágenes de grandes incendios forestales llegadas desde Europa y Australia en semanas recientes han hecho recordar con inquietud la gran "tormenta de fuego", que vivió Chile en enero y febrero de 2017 y que causó innumerables pérdidas, con daños ecológicos y humanos muy difíciles de superar.
Esa preocupación es fundada. El cambio climático, con la sequía, y el verano que se acerca con promesas de altas temperaturas, aumentan las probabilidades de siniestros similares en los bosques nacionales. Ya a la fecha hay un aumento de 10% en la cantidad de hechos registrados en el país este año en comparación con la temporada 2020; como también un alza de 21,45% en la cantidad de hectáreas afectadas. Y ni siquiera empieza la primavera.
Los datos corresponden a las estadísticas de Conaf (Corporación Nacional Forestal) y no informan las cifras recientes en Los Ríos; pero hay que recordar que desde 2010 han ocurrido casi dos mil incendios en la zona y que en los más grandes (25% del total) se han quemado más de mil hectáreas por cada uno, incluyendo tanto bosques de plantaciones como nativos. Además la cantidad total de superficie dañada por esta causa entre 2010 y 2019 subió un 84,5%. Si bien en 2020 la tendencia fue a la baja, con 8 casos frente a 18 de 2019; es un problema severo .
La ocurrencia de este tipo de situaciones podría prevenirse y evitarse. Más del 99% de ellas se produce por acción humana, como fogatas mal apagadas, vidrios abandonados, uso de elementos que generan chispas, o -lamentablemente- también intencionalidad. Además, la gravedad aumenta cuando no se toman medidas de cuidado, como zanjas de cortafuegos en las cercanías de las viviendas y limpieza de material combustible (hojas secas, maleza) en los terrenos de propiedades aledañas a los bosques.
La semana pasada (18 de agosto) fue conmemorado el Día de la Prevención de los Incendios Forestales y estos temas fueron analizados por expertos y autoridades, poniendo énfasis en la responsabilidad colectiva frente a este tipo de hechos. Ese punto es clave. Y también incluye denunciar (el número 130 está habilitado) cuando se observa peligro. Atención y conciencia ciudadana se precisan para no lamentar dramas como los ya vistos en el hemisferio norte.