El profesor Álvaro Imiguala Nirian, del Seminario San Fidel en la comuna de Mariquina y la docente Dayana Grez Silva, del Colegio Bernardo Felmer en La Unión, fueron los dos representantes de la región distinguidos hace algunos días en el marco de los cursos de perfeccionamiento docente que imparte el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) y que certifica el Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas del Ministerio de Educación.

Se trata de un reconocimiento a nivel país otorgado por desarrollar iniciativas pedagógicas 2021 para enseñar consumo responsable y fomentar un pensamiento crítico en esa materia.

Otros ocho maestros de regiones recibieron también reconocimientos en el área de la "Educación para el Consumo en la Escuela", en el cual fue premiado Imiguala; mientras que doce se coronaron como los mejores en "Educación Financiera en la Escuela", donde brilló Grez. En conjunto propusieron actividades que permitirán difundir contenidos que el Sernac considera prioritarios para formar personas conscientes respecto de la sostenibilidad, el ahorro, la planificación financiera, la exposición a mensajes publicitarios, deberes y derechos.

¿Por qué es importante esta iniciativa hoy? Fundamentalmente porque el consumo es parte de la vida cotidiana de las personas, al relacionarse con productos y servicios; sin embargo, ese vínculo necesita de conciencia, pues si la acción de "consumir" se transforma en un fin en sí misma, trae consecuencias muy negativas como el individualismo, el endeudamiento, la sobreexplotación de los recursos naturales, incluso el deterioro de la salud. Desde Sernac lo explican con claridad y señalan que se debe reforzar responsabilidad frente a las presiones del mercado; que es preciso optimizar recursos y potenciar herramientas para diferenciar deseos de necesidades (www.sernac.cl).

Considerando lo anterior es que todas estas materias caben en los programas transversales del Plan de Formación Ciudadana en los colegios y, por lo mismo, resulta clave contar con profesores habilitados en ellas; más todavía si generan propuestas para optimizar la enseñanza.

Los últimos acontecimientos vinculados a la inseguridad rural en nuestra región, específicamente concentrados en la comuna de Máfil, nos han dejado varias lecciones y una de ellas tiene que ver con la importancia de enfrentar unidos estos fenómenos.

Además de las gestiones jurídicas, policiales y políticas que hemos debido ejercer en favor de los agricultores afectados, ha sido fundamental el apoyo y acompañamiento que han brindado cientos de colegas que se han sensibilizado y han actuado solidariamente para empatizar en terreno con las víctimas.

Esto ha sido posible gracias a la organización que hemos alcanzado durante los últimos seis años los gremios agrícolas de las regiones de Los Ríos y Los Lagos (Saval, Aproleche-Osorno, Sago, Agrollanquihue y Aproval) en torno a la estructura de la Multigremial del Sur.

Ha sido gracias a esta coordinación que hemos podido enfrentar razonablemente los diversos episodios de violencia rural que se han venido sucediendo en ambas regiones durante estos últimos años. Sin embargo, como suele ocurrir en todos los ámbitos de la sociedad civil, pero muy especialmente en el entorno agrícola, somos una minoría los que participamos, financiamos y hacemos posible que este tipo de estructuras pueda funcionar.

Razones para que esto suceda hay muchas y seguramente algunas tienen que ver con la deficiencia de nuestra propia gestión al no transmitir adecuadamente la importancia estratégica de que estas organizaciones gremiales cuenten con una base de representatividad más amplia.

Hay temas culturales e históricos que también han atentado en contra de la organización de los agricultores y de tanto en tanto también surgen iniciativas de diversos actores -incluso cercanos a los propios agricultores- que afectan o coartan el fortalecimiento de la colaboración mutua.

Afortunadamente, hoy la base de apoyo de nuestras instituciones es lo suficientemente sólida para enfrentar estas adversidades de manera muy cohesionada y con la convicción de defender principios fundamentales como el derecho a desarrollar nuestras actividades productivas de manera libre y bajo un ambiente de seguridad. Por ello queremos reiterar nuestra invitación a quienes se han mantenido al margen de la participación gremial para que se incorporen a esta noble tarea de enfrentar unidos el desafío de defender el derecho a trabajar y aportar al desarrollo del país y nuestra gente en un ambiente de paz.

Presidenta Aproval Leche A.G.

Paulina Carrasco Gorman