Lágrimas por la escalera
Nuestro proyecto acogido a la ley de donaciones con fines culturales La Escalera de la Caleta El Piojo, Niebla Valdivia, ha sido dañado. Y eso nos causa profunda tristeza.
Iniciamos las obras, limpiando la escalera, lavando, sellando y mejorando la infraestructura para luego preparar e instalar los mosaicos de acuerdo a su diseño ganado a través de una consulta ciudadana disponible por más de 1 año. A la fecha han participado 1.650 personas. La opción 2 es la ganadora con el 63% de las preferencias. Es una alegría de haber conseguido acoger este proyecto a la Ley de donaciones con fines culturales, que es algo difícil; más aún, lograr el financiamiento entre la empresa privada y personas. Hacer participar a las personas en una consulta ciudadana es un trabajo que requiere dedicación, gastos en difusión, envíos de mails, explicaciones etc. Todo eso lo logramos. Tenemos el financiamiento, compramos los materiales, tenemos a las trabajadoras capacitados, instalamos la primera parte.
Pero todo o casi todo se fue a la basura.
Nunca imaginamos que podría haber personas que pudieran destruir lo que otros construyen para una comunidad altamente turística y que requiere este tipo de innovación con el objeto de atraer más y más visitantes al sector, creando una huella, una ruta de alto interés, un lugar que se debe conocer, que se debe visitar y comentar. Iniciaremos nuevamente las obras con la esperanza de que no vuelva a ocurrir.
Rogaré a Dios tener misericordia por aquellos que destruyeron nuestro trabajo; que los ayude en mejorar sus conductas destructivas de lo ajeno, que los ilumine por el camino de la luz y la esperanza. Ciudadanos, necesitamos de tu ayuda, creemos en ti.
Fernando Torres Cárdenas ftc@fundacionsanjorge.cl
Cambios políticos
Una de las causas fundamentales de la actual revolución política en curso es la ineficacia e ineficiencia de las políticas públicas del Estado de Chile, en los más diversos ámbitos de la vida de la sociedad: mal sistema educativo, mal sistema de salud, mal sistema de otorgación de viviendas... y un largo etcetera. repetido por años.
La política pública descansa en brazos de estructuras burocráticas que ya lograron su máximo beneficio social posible y no son brazos aptos para desarrollar las grandes hazañas sociales que necesitamos para recomponer la vida social. Por lo anterior, celebro la postura del nuevo Presidente electo de generar planes y programas pilotos que rompan la inercia burocrática y generen impactos en la vida de las clases trabajadoras de nuestra comuna y región.
Es de esperar que los equipos municipales y regionales recojan la oportunidad y se pongan a trotar, para que nuestra comuna y región sean los territorios punta de lanza de una nueva generación de políticas públicas a la altura de las exigencias ciudadanas y de la vida en el siglo XXI.
Nilo Zúñiga Castillo Economista nilzuniga@yahoo.com
Los primeros mil días
Hogar de Cristo y otras cuatro organizaciones realizaron la investigación "Nacer y Crecer en Pobreza y Vulnerabilidad". Las carencias en educación, salud, seguridad social, vivienda y entorno, redes, cohesión social, tienen también consecuencias nefastas sobre la infancia y la vida futura de esos niños. Y para evitarlas se proponen soluciones a nivel normativo y de políticas públicas orientadas a garantizar un piso de protección para niños, niñas y jóvenes.
La investigación habla de una primera ventana de oportunidad, que no se puede desperdiciar. Se refiere a los primeros mil días de vida, etapa clave que se inicia en el útero materno y alcanza a los tres años. Ahí es donde más se puede igualar la cancha de las oportunidades, porque, como en ningún otro momento de la vida, el cerebro está tan abierto al aprendizaje, a la formación de hábitos, a la construcción de estabilidad y equilibrio.
Pero así como es una esponja que absorbe lo positivo, también está expuesto a las múltiples barreras, adversidades y discriminaciones que limitan el desarrollo pleno e integral.
La pobreza y la vulnerabilidad infantiles son una grave transgresión a los derechos humanos establecidos en la Convención sobre los Derechos del Niño y tienen consecuencias multidimensionales y acumulativas. Las niñas y niños que crecen en pobreza, expuestos a entornos violentos o contaminados, desarrollan enfermedades infecciosas, crónicas, y mentales, y tienen menor probabilidad de terminar su educación formal. En consecuencia, es altamente probable que sean adultos pobres y vulnerables.
El piso de protección social que propone el estudio debe garantizar ingresos mínimos y acceso a servicios sociales integrales y de calidad que permitan enfrentar riesgos, erradicar la pobreza y disminuir las desigualdades. Es el momento de dar prioridad a niños, niñas y adolescentes. Es de esa nueva "nutrición" de la infancia vulnerable de la que debemos ocuparnos hoy, apostando por este piso de protección social para la infancia, que asegura todo el alimento que un niño requiere en esos cruciales primeros mil días de vida.
Claudia Fasani Hogar de Cristo