En su apertura, Lorena Pérez, directora (s) de Sernatur, señaló que "sin duda este trabajo es clave, más aún hoy en día, con todo lo que nos ha tocado vivir como sector. Es una tremenda oportunidad que hay que aprovechar".

Agregó que "el trabajo en red es clave y los informadores turísticos son la cara visible, directa para nuestros visitantes, así es que tienen una linda responsabilidad al momento de transferir seguridad, transferir protocolos en el caso de consultas", como parte "del esfuerzo que estamos haciendo como sector turístico en entregar un servicio no solo de calidad, sino que también con un fuerte énfasis en la seguridad".

Romané Véliz, directora del proyecto, indicó que los objetivos de esta capacitación están en "entregar información relevante a actores asociados a OIT de la región de Los Ríos, que les permita el manejo de brechas conservando altos estándares de hospitalidad y la socialización de herramientas concretas para identificar, seleccionar y aplicar elementos y conductas bioseguras en el ambiente de OIT".

La profesional explicó que dentro de la bioseguridad están las distintas habilidades para enfrentar y adaptar los comportamientos y acciones para disminuir el riesgo sin alterar la calidad, donde uno de los aspectos es la hospitalidad en la experiencia turística. "Hoy a través de ejemplos concretos transmitimos que la bioseguridad es un concepto que va mucho mas allá que solo hacer acciones, como por ejemplo la ventilación de espacios de trabajo, la higiene y sanitización de muebles e inmuebles, manejo de basura (basureros exclusivos para desechos covid), o instalar lo que dice un protocolo", detalló Véliz.

Agregó que estos protocolos son los que se reconocen a través de la disposición de respuestas en bioseguridad, en ejemplos frente al riesgo de la actual pandemia, tales como disponer de información sobre lugares en donde se toman los PCR, dónde se encuentran los puntos de vacunación de la comuna, los servicios de urgencia, venta o distribución de mascarillas, etc".

Mauricio Triviños, profesor del Instituto de Turismo de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Austral y relator de la actividad, destacó que "el trabajo con los actores de las oficinas de información turística regional es importante para el desarrollo de la actividad turística local".

La relevancia de los informadores de las oficinas de turismo de las comunas de la región de Los Ríos, el proceso de atención en el marco del plan Paso a Paso, hospitalidad en el servicio al cliente y gestión de reclamos con enfoque de bioseguridad, entre otros, fueron los temas tratados en el ciclo de capacitaciones que ejecuta actualmente la Universidad Austral de Chile a través del proyecto FIC Bioseguridad en Turismo. La actividad estuvo dirigida a encargados de las Oficinas de Información Turística (OIT) e Informadores Turísticos (fijos y de temporada) de cada comuna de la región.

La comunidad católica de Crucero, en Río Bueno, trabaja en la preparación de la tradicional fiesta religiosa de San Sebastián, que se realizará el próximo 20 de enero. La actividad cada año reúne a miles de fieles que asisten a las misas, acompañados de música y oración, para visitar el templo y recordar al santo.

Este año, debido a la pandemia y teniendo en cuenta la gran cantidad de adultos mayores y niños que asiste, el equipo coordinador de la festividad religiosa decidió darle un giro al evento. Por lo tanto, suspendieron la tradicional procesión por el pueblo y las misas al aire libre serán con aforo limitado y con pase de movilidad, para evitar aglomeraciones.

La novena comenzó el 11 de enero y para el día 20 están contempladas solamente las misas, a las 9, 12 y 15.30 horas, con un máximo de 360 personas. Tampoco habrá puestos comerciales, para no generar un foco de aglomeración innecesaria de personas.

"La idea es que las personas asistan por un tiempo breve a la actividad religiosa y luego vuelvan a sus hogares, evitando exponerse a las altas temperaturas", indicó Armando Hernández, coordinador de la comunidad Sagrado Corazón de Jesús de Crucero.

Gastronomía típica y artesanía de la zona albergarán las diferentes muestras y ferias costumbristas que funcionarán durante el verano en Valdivia, con apoyo de la municipalidad local y otras instituciones.

Se trata de la Feria Indígena de San Ignacio, la Feria Costumbrista de Pishuinco y las muestras costumbristas de Caleta El Piojo, Punucapa, Cabo Blanco y Los Guindos.

En relación al desarrollo de estas actividades, el encargado del Programa de Descentralización de la Municipalidad de Valdivia, Claudio Lara, dijo que "hemos realizado varias reuniones previas al inicio de esta temporada, donde se ha juntado no solamente a los representantes de las ferias, sino que también a la institucionalidad pública, que están de la mano de estas ferias".

En esa línea, detalló que se han coordinado acciones "con la autoridad sanitaria, el Servicio de Impuestos Internos y desde el punto de vista municipal con Rentas y Patentes, Fiscalización, Aseo y Ornato para poder ver cómo se recolecta la basura, y también con Fomento Productivo, que han apoyado en la difusión de estas ferias".

La primera en comenzar fue la Feria Indígena de San Ignacio, que funciona entre viernes y domingo, hasta el 27 de febrero; mientras que la segunda en inaugurarse fue la Muestra Costumbrista de Punucapa, la que funciona de lunes a domingo, hasta el último domingo de febrero. Este fin de semana abre la Feria Costumbrista de Pishuinco, durante los sábados y domingos hasta el 20 de febrero.