En la discusión actual sobre educación superior a nivel país ha vuelto un tema que, para quienes estamos en este ámbito, estaba más o menos resuelto dadas las acreditaciones y el marco legal de la educación superior. Se trata del reconocimiento de las instituciones de educación superior, tanto públicas como privadas, una materia que ahora está nuevamente en el debate, a propósito del borrador constitucional difundido el fin de semana y en el que se expresa un deber preferente del Estado por instituciones de carácter estatal.
En este sentido, y tal como lo expresa Jorge Menéndez Gallegos, Rector de ENAC, e integrante del Foro de Educación Superior Aequalis" hoy tenemos un solo sistema de educación más robusto y complejo (escrito en una ley), de provisión mixta y de caminos paralelos entre las universidades y la formación técnica profesional (los IP-CFT)"
Desde dicha perspectiva, hoy podemos observar como la Educación Superior en Chile está centrada en el estudiante, buscando hacer de esta etapa de la vida una transformación, entregando apoyos académicos, que van desde las formas de aprendizaje en asignaturas con dificultad, apoyo para trabajo en equipo, para ser más resilientes, perseverantes, entre otras.
Pero la labor que se realiza con los estudiantes se extiende a otros ámbitos, tales como el fomento del aprendizaje de idiomas y a través de esto abrirse a las posibilidades de intercambio y con la ello la necesaria internacionalización. A esto debemos agregar el trabajo del voluntariado, las escuelas de líderes, y una vida estudiantil plena que complementa la formación académica y valórica.
Todo este trabajo, que forma parte del ADN de muchos proyectos educativos, tanto público como privados, en los cuales la misión principal es el fortalecimiento permanente de la educación de calidad, entendiendo que la educación superior es una poderosa herramienta de movilidad para muchos de nuestros futuros profesionales.
Ante toda esta realidad, es indudable el impacto social, económico y cultural que realizan las instituciones de educación superior en la formación integral de miles de profesionales, quecon sus competencias, motivaciones, habilidades y valores, contribuyen al desarrollo de sus familias y entornos, así como al desarrollo de las empresas y la comunidad.
Laura Bertolotto Rectora Santo Tomás Valdivia.