Precauciones y votaciones
El plebiscito de este domingo plantea el desafío de ejercer un derecho cívico, pero a la vez prevenir contagios de covid-19, sobre todo entre los adultos mayores. Distancia social, uso de mascarillas, llevar el propio lápiz (pasta azul) y usar alcohol gel, son recomendaciones básicas para el 25 de octubre.
De acuerdo a cifras del Servicio Electoral, los adultos mayores son quienes más votan en Chile. En el último proceso, por ejemplo, se presentó a las urnas un 69,16% de las personas entre 65 y 69 años de edad; lo que contrasta con el 29,43% de los jóvenes entre 18 y 19 años, como también con el 46% nacional. Los estudios además indican que, en la medida que la población chilena envejece, tiende a sumarse más a estos procesos.
En el plebiscito de este domingo debiera pasar algo similar, aunque la pandemia de coronavirus plantea un desafío adicional, pues los mayores constituyen el grupo de más alto riesgo en caso de contagio. Por lo mismo, se ha establecido una hora preferencial para ellos entre las 14 y 17 horas y se ha definido un protocolo para permitirles -en todos los horarios- votar primero.
En Los Ríos, además, se ha decidido la apertura de doce locales adicionales de sufragio (se pasó de 85 a 97) para garantizar la adecuada distancia social entre los participantes y evitar las aglomeraciones.
Todo lo anterior se suma a las recomendaciones básicas del uso de mascarillas, utilización de alcohol gel, lavarse las manos y a portar el propio lápiz (de pasta azul), que vale para electores de todas las edades.
Estas medidas parecen ya obvias a estas alturas del año, pero es necesario recalcarlas, porque muchas personas las olvidan o cometen errores. Por ejemplo, de nada sirve cubrir sólo la boca y no la nariz con la mascarilla; las antiparras solas no bastan para las personas con enfermedades crónicas o inmunodeprimidas (deben ser ambas) y el alcohol gel no puede faltar en cada salida. Con mayor razón al ir a votar. En esta jornada hay que usarlo -aconsejan los expertos en prevención- al llegar a la mesa de votación, al doblar los votos en la cámara secreta y luego de depositarlos en las urnas: tres pasos simples, pero eficaces. Además, no se debe olvidar el lavado de manos y cambio de ropa al llegar al domicilio de vuelta.
Aunque pueda parecer tedioso, tomar estas precauciones es la única manera de ejercer derechos cívicos, pero de una manera segura, en tiempos tan complejos como los actuales.