Contraloría instruyó un sumario en SSV por irregularidades en el arriendo de residencias sanitarias
POLÉMICA. Luego de realizar una auditoría, el órgano contralor cuestionó pagos por prestaciones no empleadas, y que algunos recintos arrendados no cumplían con la normativa sanitaria vigente.
La Contraloría General de la República instruyó un sumario administrativo al interior del Servicio de Salud Valdivia (SSV) luego de detectar una serie de irregularidades en la habilitación de residencias sanitarias durante el primer semestre del año pasado.
La acción fue ordenada a raíz de los antecedentes obtenidos por medio de una auditoría a la "habilitación de la infraestructura de salud de emergencia para afrontar los efectos de la pandemia covid-19 en el Servicio de Salud Valdivia", ejecutada precisamente por Contraloría para el período comprendido entre el 1 de enero y 30 de junio de 2020.
Entre los principales cuestionamientos descritos por el órgano contralor están el pago por prestaciones no empleadas en tres residencias habilitadas en dicho período, correspondientes al Hostal Boutique Montepiedra de Valdivia, al Apart Hotel Santa María de Valdivia, y al Sanatorio Santa Elisa de Mariquina.
También se cuestiona la carencia de criterios técnicos para el arrendamiento de dichos recintos y, además, que algunas de estas residencias no cumplían con requisitos básicos para su habilitación.
Lugares NO EMPLEADOS
En el informe final de la auditoría al Servicio de Salud Valdivia, Contraloría constató que "el SSV carecía de medios formales que le permitieran determinar la cantidad y ubicación de las residencias sanitarias a habilitar en la región", y además que "el modelo de contratación que implementó para el arrendamiento de los tres inmuebles utilizados como residencias sanitarias, no determinó que el pago se debía limitar a lo efectivamente utilizado, obligándose al desembolso por el uso total de los recintos, lo que irrogó un pago por prestaciones no empleadas de $189.263.472, IVA incluido".
La auditoría detalla que en el caso del Sanatorio Santa Elisa, que fue arrendado por un período de dos meses, contados desde el 6 de abril hasta el 6 de junio de 2020, por un valor total de $104.165.460, por el uso de 90 camas disponibles. Sin embargo, la ocupación efectiva de la residencia fue de un uso de ocho días cama, entre el 17 al 29 de mayo, lo que ascendería a un monto de lo efectivamente utilizado de $154.319 que correspondería a un 0,14% de ocupación, generándose por tal motivo un pago por prestaciones no empleadas de $104.011.141.
En el caso del Hostal Boutique Montepiedra, el SSV pagó a la Sociedad Baigorri SpA un monto total de $56.700.003 por un período comprendido desde el 17 de abril al 16 de julio de 2020, pero el monto efectivamente utilizado por el Servicio de Salud Valdivia asciende a $8.865.000, lo que genera un pago por prestaciones no empleadas de $38.385.003.
Mientras que para el arriendo del Apart Hotel Santa María el SSV desembolsó un monto de $54.578.084. Sin embargo, el valor de uso efectivo alcanzó a $3.838.658, lo que generó un pago de prestaciones no empleadas de $50.739.426.
Según el informe, esto último transgrede el artículo 6 de la ley 19.886, "que exige a la Administración el deber de propender a la eficacia, eficiencia y ahorro en sus contrataciones". También los artículos 3 y 5 de la ley 18.575, "que señalan que esta debe observar los principios de eficiencia, eficacia y economicidad, velando por la eficiente e idónea administración de los medios públicos"; y los artículos 52 y 53 en cuanto a que "el interés general exige el empleo de medios idóneos de diagnóstico, decisión y control, para concretar, dentro del orden jurídico, una gestión eficiente y eficaz".