Cifras de acceso a la información
La Asociación Nacional de la Prensa, ANP, dio a conocer el Barómetro 2021 realizado junto al Consejo para la Transparencia. Desde regiones preocupa la centralización de vocerías y de facilitación de antecedentes, aunque las noticias sean locales y de interés público.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), el Cuerpo de Bomberos, la Teletón y los Ministerios de las Culturas y de Agricultura, fueron algunas de las instituciones mejor evaluadas en el Barómetro de Acceso a la Información 2021, dado a conocer al finalizar 2021 por la Asociación Nacional de Prensa (ANP) y realizado junto al Consejo para la Transparencia (CPLT), con apoyo de la Universidad Central.
El análisis fue elaborado sobre la base de encuestas contestadas por 433 editores y periodistas de todo el país, incluyendo a la región de Los Ríos, para evaluar niveles de entrega de información de 64 entidades públicas (de gobierno, fiscalizadores) y particulares (empresas y otros) de acuerdo a los parámetros de disposición, confiabilidad, precisión y oportunidad en el otorgamiento de datos.
En términos generales los resultados son mejores que los de la medición efectuada en 2019 (41,4% frente a 39,5% ), lo que mostraría -a juicio de los investigadores- una mayor transparencia de los organismos observados respecto de la medición anterior, aunque proporcionar material requerido de manera oportuna sigue siendo una falencia.
Desde las regiones otro ítem que inquieta es la excesiva centralización de vocerías o de facilitación - y control- sobre el aporte de antecedentes (hay que pedirlos a nivel central), aunque las noticias se refieran a temas locales y amplio interés público.
El Barómetro de la ANP y CPLT no busca generar una crítica gremial; pero sí mostrar estos antecedentes para aportar también a que las organizaciones mejoren sus desempeños y que no dejen espacios a incertidumbres o a desinformación que, finalmente, lesionan la confianza pública y convivencia ciudadana.
Observar estos resultados se hace interesante hoy, cuando comienza un año lleno de nuevos desafíos nacionales y regionales, durante el cual se requerirá de un máximo compromiso de las instituciones estatales y privadas con la manera en que se vinculan con la comunidad y con los medios, recordando que la transparencia es la primera ruta que se debe transitar en la construcción de confianzas y que el derecho a la información (por lo tanto la obligación de entregarla) y de la libertad de prensa se encuentran en la base de una democracia sana.