Regionalización en el borrador
Chile como Estado Regional es la propuesta de la Convención. Más allá del Apruebo o Rechazo, el tema está en la mesa. El tema regionalista ha sido importante en la historia de Los Ríos. Está en la razón de su nacimiento. Sin embargo la propuesta también genera polémicas.
El primer artículo de la propuesta constitucional que será plebiscitada el 4 de septiembre señala que "Chile es un Estado social y democrático de derecho. Es plurinacional, intercultural, regional y ecológico. Se constituye como una república solidaria. Su democracia es inclusiva y paritaria". Desde esa definición se desprenden muchas líneas para el accionar futuro del país respecto de las decisiones políticas de largo plazo, la distribución del poder, el vínculo con la comunidad, entre otras.
En Los Ríos se ha puesto atención a la discusión de todas ellas, pero especialmente a la que propone el establecimiento de regiones con instituciones políticas y administrativas autónomas -Gobiernos Regionales, Municipios, entre otros- "las que deberán relacionarse en un marco de cooperación, integración armónica, solidaridad y desarrollo justo", manteniendo la integridad del país y territorio, según se explica en la Guía Práctica sobre el texto.
Además se mira hacia las fórmulas presentadas para ampliar la disponibilidad de recursos que permitirían existir a esas instituciones.
Este tema regionalista ha cruzado la historia local y ahora se integra a una propuesta formalizada de administración nacional; sin embargo ese proyecto despierta también múltiples polémicas, especialmente en lo referente a autonomías territoriales indígenas. Frente a ello, hay voces que llaman a mirar con perspectiva. En entrevista con www.soyvaldivia.cl el director del CER-Uach Egon Montecinos afirmó que la descentralización es un camino de largo aliento, que va más allá de los resultados de una votación. Y explicó: Si la Constitución es aprobada, estas ideas podrían aplicarse en un horizonte no menor a cinco años. No antes, pues requieren de otras instituciones como las Asamblea Regional que reemplazaría al Senado para ejecutarse. Si es rechazada (no olvidemos que las encuestas indican esa opción), ellas serán sin duda parte de las nuevas iniciativas que busquen cambios de la Carta Magna, algo transversalmente ya considerado.
¿Y por qué trascenderían? A juicio de Montecinos, porque ya se entendió en distintos niveles la necesidad de regiones con más atribuciones. "Independientemente del Apruebo o del Rechazo, este es un tema que quedó instalado públicamente".