(viene de la página anterior)
los profesores y apoderados y conseguimos la primera parte del segundo edificio. Luego, también me tocó participar de la consolidación del edificio definitivo. Hoy hay un edificio muy completo, que es un liceo politécnico. También me hice cargo de una situación que me ocurrió cuando llevaba ocho años de alcaldía. Tras perder la elección de 2004 me enviaron a la Isla del Rey a trabajar. Ahí estuve cuatro años y conocí cuánto sufría la comunidad, me traje grabado en la mente todo lo que era necesario hacer. Cuando volvía a ser alcalde construimos escuela nueva, la única escuela rural que tiene gimnasio. Pavimentamos desde el embarcadero hasta el interior de la isla y postulamos un proyecto de construcción de casetas sanitarias y alcantarillado, además de uno de agua potable para que nunca más tomen aguas de las norias. También me enorgullece haber sido parte de que se inicien las etapas de asfalto del camino Corral-Valdivia, porque siempre mi discurso fue que a este camino se le pusiera más inversión. Hoy la gente está creyendo que es un camino de verdad porque hay 18 kilómetros asfaltados desde Valdivia a Corral y se anuncian 15 más desde Corral hacia Valdivia. También destaco una serie de proyectos en el área rural, escuelas, nuevas postas de auxilio. ¡Mancera! Si tu vas ahora es otra isla. Estamos ad portas de que el Gobierno Regional apruebe el Eco Museo de la isla. La barcaza también fue parte de una gran gestión, además de la reanimación histórica que también ha hecho conocida a la comuna a nivel internacional.
-Para Corral el puerto es emblemático ¿Qué ocurrió con él durante sus períodos como alcalde?
-Conocí el esfuerzo que hicieron un centenar de corraleños, entre ellos mi abuelo, mi papá y mis hermanos, que trabajaron en el puerto. Siempre soñaron con que vuelva a nacer después de haber sido destruido por el terremoto. El puerto volvió, no como lo queríamos, pero está vivo. Me tocó la gracia de inaugurarlo al lado del Presidente Patricio Aylwin y luego como puerto chipero con el Presidente Ricardo Lagos, hasta llegar a Sebastián Piñera quien en dos ocasiones visitó Corral. Comprometió gestiones para que pudiera transformarse en un puerto mayor. Eso me animó a tomar contactos con empresas y empresarios no solamente chilenos, también internacionales. Así tuvimos contacto con algunos inversionistas chinos. Quedamos ahí porque apareció una situación que es justa y apoyo, relacionado con los pueblos originarios, quienes piden que se reserven las áreas de su entorno para proyectos de desarrollo comunitario. Eso dejó stand by toda la situación del puerto, quedamos con los planos hechos, con una participación ciudadana hecha porque hay que ponerse de acuerdo con los pueblos originarios. Le dejo la tarea a quien sea el nuevo alcalde o alcaldesa.
-¿Qué siente que falta por hacer?
-Esos desafíos se los dejo a las nuevas autoridades. Hay todo un trabajo hecho con proyectos como el camino alternativo a la cota 50 por la parte alta de Corral para alivianar el paso de camiones por el centro de la comuna; el tema camino Corral-La Unión, solo falta sensibilizar y convencer a Conaf para terminar los 8 kilómetros.
-¿Qué le aconsejaría al próximo alcalde?
-Que no cometan un gran error que alguien cometió en algún momento cuando fue alcalde, tratar de hacer borrón y cuenta nueva. Si bien es cierto se hicieron algunas obras en ese período, no todas las que se necesitaban. Le pediría que revise y que le saque provecho a todos los funcionarios que el actual alcalde le deja. Todos tienen una riqueza de desarrollo en su mente producto de los 26 años de trabajo que llevamos. No hay mejor administración que recoger lo que se hizo y avanzar.
-¿Cuáles eran sus planes en esta misma fecha, el año pasado?
-Mi sueño en el área política era terminar como diputado o consejero regional, subir un poco el peldaño. Pero no renuncié cuando debía hacerlo para optar por ese tipo de cargos. Tomé esa decisión porque no quise volverle las espaldas a una decena de hombres y mujeres que me ayudaron a hacer lo que en conjunto hicimos por Corral, a las personas que trabajan en la municipalidad. Dejé la ambición política por favorecerlos, para dejarlos confirmados en su trabajo por lo menos un año más. Así, mi sueño cambió al de volver a ser candidato a alcalde, para cerrar un ciclo. Estaba en eso, trabajando en la campaña, cuando cambió la ley. Afortunadamente no alcancé a solicitar créditos.
-¿Y cuáles son sus planes ahora?
-El trabajo público es un vicio que se mete dentro de uno. Me siento político, pero político de pueblo. Tengo varias opciones, una es volver a educar; mientras que la otra es mantenerme vigente en alguna situación que pudiera darse con respecto a mi experiencia como hombre público, con estos 26 años que tengo en esta área. Quiero ponerme al servicio de cualquier situación de trabajo que signifique desarrollo para la comuna, para la sociedad. Ahora estoy viendo qué pasa y mientras tanto sigo siendo alcalde.
- Y en cuanto a sus aspiraciones políticas ¿Qué espera en el futuro?
-Creo que no voy a tener la opción de terminar como parlamentario. Quiero mantenerme vigente porque, si la ley dice que puedo volver a ser alcalde y la gente me elige, mi sueño es regresar para rematar todo lo que se necesita para seguir avanzando.